Una carrera muy veloz de los toros de Miura clausura los encierros de 2013

Una carrera muy veloz de los toros sevillanos de Miura, en la que una joven australiana resultó herida por asta de toro, puso ayer fin a los encierros de los sanfermines de 2013.
Los corredores se pudieron lucir ante las astas en esta última carrera, que fue cubierta por la manada muy estirada, cinco miuras por delante y el sexto algo más retrasado junto a los cabestros.
A las ocho en punto de la mañana, después de que los mozos entonaran los tres cánticos en los que piden la protección del santo, la manada salió de los corrales de Santo Domingo y, a diferencia de lo que es habitual, los cabestros no tomaron la delantera, sino que fue un toro el que abrió la carrera.
Este toro salió a gran velocidad e incluso se separó unos metros de sus hermanos y ocasionó momentos de peligro al derrotar hacia la derecha, lo que sorprendió a los corredores que se encontraban en esa zona.
Una joven australiana de 23 años fue corneada en el tórax por uno de los toros de Miura.
Esto es algo poco habitual, ya que a lo largo de la historia tan solo cinco mujeres, incluida esta, han resultado cogidas por el toro en sanfermines, todas ellas extranjeras.

imágenes de la fiesta
Estos han sido sin duda unos sanfermines de llamativas imágenes, la primera de ellas la de una gran ikurriña descolgada delante de la fachada del Ayuntamiento el día 6 que hizo que se retrasara el lanzamiento del chupinazo dieciocho minutos, algo que nunca había sucedido en las Fiestas de San Fermín.
La más dramática fue la del montón de corredores, toros y cabestros en la entrada de la plaza de toros el sábado 13, tras el séptimo encierro, que dejó diecinueve heridos, uno de ellos de extrema gravedad, un joven de 19 años de Vitoria que evoluciona favorablemente, por lo que al parecer su vida ya no corre peligro. Junto a esas imágenes dramáticas ha habido otras que han generado gran malestar y crítica, las de carácter sexista, que un año más se han repetido en actos multitudinarios como el chupinazo, en el que chicas subidas a hombros, en muchos casos sin camiseta, ni sujetador, son manoseadas por jóvenes que se encuentran a su alrededor.
Desde diferentes ámbitos se han rechazado esas prácticas, que han sido calificadas como “vejatorias”, “inaceptables” e “incompatibles con la convivencia”, que además “ensucian” la imagen de Pamplona y sus fiestas conocidas internacionalmente, por lo que se ha instado a reflexionar al respecto y a tomar medidas.
Con el 14 de julio, y mientras las miles de personas que durante el fin de semana se han desplazado hasta Pamplona apuraban las últimas hora de las fiestas, llegó el “Pobre de mí” con el se despiden estos sanfermines y comienza la cuenta atrás para los de 2014.
Fue el momento de recoger los pañuelos rojos que durante nueve días han permanecido anudados al cuello, de guardar la ropa blanca y de hacer balance de unas fiestas que para muchos son “unas fiestas sin igual”.
Unas fiestas que, para sorpresa de muchos pamploneses, han sido calurosas y soleadas, con temperaturas que han superado los 30 grados, algo difícil de imaginar los meses previos, que se han caracterizado por el frío y la lluvia.
Desde el servicio de Urgencias del Complejo Hospitalario se indicó que 50 corredores fueron trasladados a los hospitales, seis de ellos a causa de heridas por asta de toro.
Diecinueve corredores precisaron ingreso hospitalario y, hasta ayer, ocho permanecían ingresados (seis por asta y dos por traumatismo), cuatro de ellos correspondientes al encierro del día 13 (dos por asta y dos por traumatismo).