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jueves | 25 abril | 2024
"Me ha hecho mucha ilusión, no me lo esperaba para nada, porque la película no se ha estrenado todavía y pensaba que no tenía ninguna posibilidad", es lo primero que dice la ganadora del Óscar por "Vicky Cristina Barcelona", en una entrevista con Efe para promocionar un filme en el que también ha participado como productora.
"Volver a nacer", efectivamente, no se verá en las pantallas españolas hasta este viernes, aunque pasó por el Festival de Cine de San Sebastián, y cuenta con la participación de su hermano Eduardo en la música del filme.
El personaje de Penélope Cruz, Gemma, le conecta de nuevo con el cine italiano y con Sergio Castellito, y habla de una experiencia que ella ha vivido recientemente: la maternidad.
"Gemma no piensa en otra cosa y su cuerpo no le responde. Sigue intentándolo de mil maneras y no le funciona, ni siquiera la adopción. Entonces llega un niño de la manera más inesperada, ese niño se convierte en el amor de su vida", explica Cruz.
"Es una historia muy bonita que me tocó mucho cuando la leí. Es la misma escritora de 'No te muevas' (Margaret Mazzantini, pareja de Castellitto) y lo que escribe me obsesiona, siempre me deja durante años pensando en esos personajes", añade.
La actriz recorre tres décadas de la tormentosa existencia de su personaje, en cuya vida se cruzan personajes como Diego (Emile Hirsch), el hombre del que se enamora, o la asistente social interpretada por Jane Birkin que les negará la adopción. Y en medio de todo el drama personal, un drama colectivo: el de la guerra de los Balcanes.
"Vive las dos guerras al mismo tiempo. Fue muy importante para nosotros rodar allí, en Sarajevo y hablar con tantas familias que la habían vivido, muchos de ellos habían perdido gente. Cuando sucedió yo era muy pequeña y es imposible entender lo que pasó si no ves la ratonera que es Sarajevo. Es un valle, está totalmente rodeado, las montañas no dejan salir", asegura.
"Es increíble lo que pasó allí hace tan poco tiempo y en un lugar que está tan cerca. Recuerda a cosas terribles que están sucediendo ahora, como Siria, que van pasando los días y mueren más y más niños. Es terrible. Las películas no están para dar lecciones de nada, pero sí para hacer recordar", reflexiona.
A pesar de que Cruz ha explotado a las órdenes de Woody Allen, Rob Marshall y, sobre todo, Pedro Almodóvar, un físico racial que le emparenta con Sofía Loren o Anna Magnani, el cine italiano le ha reclamado para perfiles totalmente distintos.
"Justamente aquí, que interpreto a una italiana, o en 'No te muevas', que era italiana con mezcla de sangre albanesa, no es ese tipo de mujer para nada. Italia (su personaje de 'No te muevas') era una especie de espantapájaros y esta es una mujer de clase alta y un 'look' que no tiene nada que ver con esas actrices", explica.
Con ella también comparte cierta obsesión con la maternidad. "Yo siempre he querido niños, desde que era una niña, pero hay otras mujeres que no tienen esa necesidad y pueden ser completamente felices sin tenerlos", explica.
Tiene a punto de estrenar su reencuentro con Almodóvar para un pequeño cameo en "Los abrazos rotos" ("va a ser un peliculón", dice), y se prepara ahora para, de nuevo, "volver" con otro de sus directores fetiche, Fernando Trueba, en la secuela de "La niña de tus ojos", con la que ganó su primer Goya.
"Como actriz para mí es muy interesante ver dónde está esa mujer, Macarena, 15 años después. Tiene que ser la misma, la misma esencia porque es ella, pero le han pasado muchísimas cosas", asegura ilusionada.
Y hablando de ilusión, Cruz concede la entrevista pocas horas antes de darse a conocer las nominaciones de los Óscar, para las que su marido, Javier Bardem, suena como candidato al premio al mejor actor secundario por "Skyfall".
"Me haría mucha ilusión que le nominaran, porque creo que se lo merece mucho, ha hecho un trabajo increíble. Dentro de un rato se sabrá", concluye.
Por Mateo Sancho Cardiel
