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viernes | 19 abril | 2024
Las fuerzas de seguridad marroquíes y la Guardia Civil impidieron ayer que dos grupos de inmigrantes, de 500 y 200 subsaharianos, entraran a Melilla saltando la valla fronteriza por las zonas cercanas a los pasos de Beni Enzar y Barrio Chino, aunque ninguno de ellos llegó a tocar la alambrada.
Los dos grupos de inmigrantes fueron vistos poco antes de las 07.00 horas, cuando ya había amanecido, por lo que se activó el protocolo, en el que también participó un helicóptero de la Guardia Civil.
Durante más de una hora, las fuerzas marroquíes y la Guardia Civil mantuvieron la alerta, hasta que poco después de las ocho de la mañana los inmigrantes pudieron ser dispersados por los agentes de Marruecos.
Las zonas a donde se dirigían los inmigrantes son los puntos en los que se produjeron los últimos saltos masivos, el último el pasado 28 de febrero, en el que consiguieron entrar 214 inmigrantes.
mallas antitrepa
Precisamente, en ese tramo, entre los pasos fronterizos de Beni Enzar y Barrio Chino, es donde el Gobierno empezó a reforzar el perímetro con las mallas antitrepa anunciadas por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en su visita a Melilla. En concreto, se han instalado 950 metros que ya habían sido contratados antes del anuncio, como una continuidad de la malla que se instaló en noviembre junto a la concertina en varios puntos sensibles de la valla, sumando entre todos 2,5 kilómetros.
Próximamente serán contratados los 15.000 metros de malla antitrepa anunciados por Fernández Díaz mediante un procedimiento de urgencia.
Por otra parte, la Policía Nacional de Ceuta considera que las avalanchas en las fronteras de Ceuta y Melilla se están produciendo por la intención de los inmigrantes subsaharianos de acortar su espera en Marruecos.
La táctica de entrar en grupo es relativamente nueva y la misma tiene su origen en la pretensión de los inmigrantes de alcanzar España a la mayor brevedad.
La Policía estimó que los inmigrantes han descubierto que los asaltos masivos son una manera de estar menos meses esperando en Marruecos e intentan una fórmula para acceder al territorio nacional de una manera rápida.
Los agentes consideran que los subsaharianos han comprobado que los intentos de entrar en Ceuta y en Melilla en grandes grupos de no menos de cien personas son una solución para acortar los tiempos de espera en Marruecos, donde suelen vivir en condiciones infrahumanas escondidos en los montes.
