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miércoles | 24 abril | 2024
El rey Felipe VI se embarcó ayer en el “Aifos” para timonearlo en la última jornada de regatas de la 35 Copa del Rey Mapfre. Don Felipe llegó al velero de la Armada Española, en el Real Club Náutico de Palma, poco antes de las 11.00 horas de la mañana.
El jueves, el rey Felipe y la reina Letizia posaron en los jardines del Palacio de Marivent junto a sus hijas las infantas Leonor y Sofía, a las siete de la tarde. Mismo escenario que en los años anteriores, desde que en 2014 decidieran volver a abrir las puertas del palacio para el encuentro familiar con los medios de comunicación. En un posado desenfado e informal la familia dio muestra de la buena relación y complicidad que tienen entre ellos, intercambiando bromas con las infantas mientras posaban, con unos looks muy veraniegos, al más puro estilo marinero.
La reina optó por un pantalón blanco con una camiseta de rayas sencilla y sandalias planas, mientras don Felipe siguió en la misma línea y combinó una camiseta azul con pantalones en el mismo color que Letizia y zapatos marrones. Las infantas lucieron diferentes vestidos, siendo el de la princesa Leonor blanco combinado con las mismas cuñas que en la cena que reunió a toda la familia la semana pasada, mientras que la infanta Sofía llevaba un vestido de rayas y sandalias plateadas.
El rey Felipe VI admitió que estas vacaciones están siendo “atípicas”. “Es atípico todo un poco pero hay que adaptarse”, declaró en relación a este verano y a la situación del país, si bien no quiso “entrar en terrenos políticos”. El rey fue preguntado por la posible investidura de Mariano Rajoy, a lo que contestó que no había que “entrar en terrenos políticos”.
Además, en relación a si tendrá que volver de nuevo a Madrid durante sus vacaciones, indicó que se “adaptarán” a lo que vaya sucediendo.
Por otro lado, el rey también prácticamente descartó acudir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Ir, dijo, sería “muy complicado”, por lo que seguirán este acontecimiento por los medios de comunicación.
El rey Felipe VI, tras recibir a las principales autoridades de Baleares el pasado lunes en el Palacio de la Almudaina, estuvo este miércoles de nuevo en Madrid para mantener el habitual despacho semanal con el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Zarzuela.
La familia real, que llegó a Palma de Mallorca hace una semana por separado, ha disfrutado de la tranquilidad y vida social de la isla, sorprendiendo hace unos días saliendo a cenar acompañados por los reyes eméritos y la infanta Elena, con sus dos hijos. Una estampa que llevaba años sin producirse.
Al rey también se le pudo ver disfrutando de su familia en el 80 cumpleaños de su tía Doña Pilar, al que Letizia no acudió.
