Detienen a un presunto pederasta que impartió charlas en un colegio gallego

El presunto pederasta J.R.P, detenido en Valencia, que se hace llamar “Juanri” en Internet y se define como “joven estudiante de Magisterio”, visitó en dos años al menos 74 colegios y escuelas infantiles, cuatro en el extranjero y uno en Galicia, dando charlas educativas, según los vídeos que él mismo publicó en su canal de Youtube.
En ese canal incluye cinco vídeos en otras tantas escuelas infantiles españolas junto a una batería de grabaciones orientadas a niños en función de su etapa educativa, con contenidos sobre ciencias, naturaleza, historia y cuentos infantiles.
En las grabaciones aparece “Juanri” en compañía de los niños de los distintos colegios realizando actividades diversas, en la mayoría de los casos sentado junto a ellos en corro y explicándoles alguna materia, como el cambio del clima o la refracción de la luz.
Los niños no son los únicos protagonistas de sus vídeos educativos, pues entre ellos aparecen entrevistas a expertos, profesores y directores de centros e incluso en una de las grabaciones, este supuesto pederasta charla con un secretario autonómico de Educación de la Generalitat Valenciana.
Tras conocerse la detención, varios centros enviaron mensajes a las familias asegurando que “Juanri” jamás estuvo solo con los menores y que en las grabaciones, como las que aparecen en Youtube, siempre estuvo presente personal del colegio, según la madre de un alumno.
“Juanri” apoyaba su canal en Youtube con un blog también especializado en contenidos educativos en el que ofrece noticias sobre los distintos colegios, orientación para los padres que buscan centro y toda una batería de recursos para que los profesores los empleen en las aulas durante las etapas educativas.
La Guardia Civil detuvo el pasado lunes, día 6, a este joven de 25 años, que ya ingresó en prisión por orden judicial, acusado de abusar sexualmente de un menor de edad, de tenencia y distribución de pornografía infantil y de un delito contra la intimidad.
Los agentes investigan el material incautado para poder determinar la existencia de más víctimas, según informó la Guardia Civil.