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lunes | 6 mayo | 2024
Los investigadores del Plan de Lucha contra incendios forestales de Extremadura (Plan Infoex) hallaron “indicios claros” de que el fuego que afecta desde la noche del pasado jueves a la reserva natural de la Garganta de los Infiernos, en la comarca cacereña del Valle del Jerte, fue intencionado.
La consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García, informó de que la investigación ha puesto en evidencia que el incendio comenzó con al menos dos focos, por lo que ya se han trasladado estos indicios al Seprona de la Guardia Civil, al tiempo que solicitó la colaboración ciudadana para tratar de identificar al autor o autores de un fuego que los vientos de la noche del sábado habían reavivado.
punto alto
Las llamas se encontraban ayer en un punto muy alto al que los medios terrestres no podían llegar, por lo que el trabajo contra las llamas se redujo drásticamente durante la noche del sábado, ya que sin luz solar los medios aéreos no podían despegar por seguridad.
No obstante, pese a que se reavivaron las llamas, el perímetro afectado por el fuego no se incrementó, de modo que las estimaciones de superficie quemada, principalmente de matorral, brezos y piornos, se mantiene prácticamente igual que este el sábado, es decir, en torno a las 800 o 900 hectáreas.
Desde primera hora de la mañana de ayer más de una veintena de medios aéreos de Extremadura, del Ministerio de Medio Ambiente y también del Gobierno de Castilla-La Mancha retomaron las tareas para tratar de sofocar un incendio que mantenía activado el Nivel 2 de peligrosidad, pese a que no existe ningún riesgo para la población ni edificaciones.
Asimismo, continuaba restringido el acceso de bañistas a Los Pilones y la piscina natural de Jerte por precaución ante la presencia de humo.
En concreto, los medios que trabajaron ayer en la zona eran quince helicópteros y cinco aviones anfibios, además de un helicóptero y otro avión de coordinación, junto a siete retenes y cuatro brigadas.
