A pesar del incremento generalizado en la inseguridad, La Coruña se mantiene como una de las ciudades más seguras de España, contando no solo con un menor número de robos que otras partes del país, sino también con niveles de violencia inferiores a los que se experimentan en el territorio nacional.
Sin embargo, esto no quiere decir que no haya peligros. Un ejemplo de esto es el del sector comercial, con los negocios afirmando que han vivido un aumento en los robos durante los últimos años.
Al hablar de delincuencia, prácticamente ningún negocio está seguro, ya que todos los bienes tienen un valor en mercados paralelos, sin embargo, sí existen productos más vulnerables que el resto.
En España, los embutidos, vinos y aceites, siguen siendo los productos más robados en los supermercados, mientras que la tecnología, prendas de vestir y perfumes experimentan un riesgo importante en el sector minorista.
En cuanto a cómo se realizan estos robos, existe un amplio número de estrategias implementadas por los criminales para sortear las medidas de seguridad. Estas pueden ir desde la manipulación psicológica y el uso de la violencia contra el personal, hasta la implementación de herramientas para la destrucción de la infraestructura.
De acuerdo a un reporte de la firma Securitas Direct, los métodos de robo más utilizados en el país incluyen la táctica del butrón (realizado usualmente durante la noche u horarios de inactividad), asaltos escaparatistas, uso de lanzas térmicas, alunizaje con vehículos, e incluso manipulación de cerraduras.
Este cambio constante en las estrategias criminales ha generado un aumento en la demanda de nueva tecnología para la seguridad física, fortaleciendo el desarrollo de medidas holísticas y más efectivas. Algunas de las más utilizadas incluyen:
Protección contra hurtos
Las principales cadenas de supermercados de la región estarían invirtiendo en sistemas antirrobo diseñados con la finalidad de brindar protección especial a productos valiosos, así como para monitorear de forma más efectiva los ingresos y salidas del establecimiento. Estos son más efectivos que las etiquetas antirrobo tradicionales, y pueden abarcar espacios mayores con un menor número de dispositivos.
Monitoreo en tiempo real
Cada vez más empresas de seguridad en La Coruña están brindando servicios de monitoreo remoto en tiempo real, implementando un buen número de sistemas de videovigilancia, así como recolección y procesamiento de datos para brindar respuestas más efectivas. Drones, cámaras de seguridad con Inteligencia Artificial y sistemas de vigilancia vial, son solo algunas de las herramientas que se utilizan con este fin.
Comunicación directa con las autoridades
Hace tan solo unos meses, el Ayuntamiento de La Coruña confirmó que siguen expandiendo el programa "Comercio Seguro", una aplicación móvil que sirve como canal directo entre los comerciantes y la Policía Local. El programa, que ya contaría con al menos 90 comercios adscritos, no solo agiliza la respuesta de las autoridades, sino que además recopila datos valiosos para mejorar las estrategias contra el crimen.
Ciberseguridad, cada vez más importante
Durante el 2024 se presentó un incremento cercano al 10% en los ciberdelitos, con los negocios siendo las víctimas predilectas de los criminales. Ante esto, la instalación de software antivirus basado en inteligencia artificial y el desarrollo de buenas prácticas enfocadas en disminuir los ataques informáticos, se ha convertido en una prioridad para el sector comercial.
Protección de flotas
Aunque en menor medida que en otras partes del país, el robo a camiones de mercancía sigue en ascenso, obligando a las empresas que tienen una flota de transporte de mercancía a implementar herramientas como sistemas de geolocalización, conducción remota e incluso inhibición de señales para disminuir las probabilidades de ser víctimas de los criminales.
Los sistemas de videovigilancia también se estarían potenciando en almacenes y aparcaderos para brindar una protección aún mayor.
La Coruña es una de las ciudades más seguras de España, sin embargo, esto no quiere decir que los empresarios y comerciantes deban dormirse en los laureles. La tecnología, aunque efectiva, tendrá que avanzar aún más en la Comunidad para asegurar que los ciudadanos puedan seguir trabajando de forma segura.