Ellas somos nosotras

El dato es escalofriante y nos tiene que hacer pensar. Una de cada cuatro mujeres atendidas por Cáritas fueron víctimas de violencia o se encontraban en contextos de prostitución. En los últimos años se ha producido además un aumento en el número de mujeres en situación de sin hogar. La violencia contra la mujer tiene un impacto mayor entre las que se encuentran en situación de pobreza o exclusión social.

Esa es la gran realidad puesta de relieve después del trabajo llevado a cabo a través de una treintena de programas de atención destinados a la mujer teniendo en cuenta las múltiples barreras y obstáculos a los que se tienen que enfrentar a la hora de acceder, mantenerse y progresar en el mercado laboral.

Otro de los factores que se hacen presentes en estas mujeres es la invisibilidad que no solo vulnera, excluye y las estigmatiza y aumenta el riesgo de que sufran abusos, violencia y explotación.

La entidad de la Iglesia ha lanzado una campaña “Ellas somos nosotras” con el objetivo de visibilizar las múltiples brechas y situaciones de exclusión que sufren las mujeres. La propuesta pretende dar a conocer a la sociedad la situación de vulnerabilidad en la que se ven inmersas. La violencia contra la mujer tiene un impacto mayor en aquellas que se encuentran en situación de pobreza o exclusión Por tal motivo es fundamental avanzar, con paso firme y decidido, en el derecho de las mujeres hacia la igualdad y a una vida libre de todo tipo de violencia.