El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llamó al presidente francés, François Hollande, para ofrecerle “todo su apoyo” y sus condolencias después del ataque terrorista de Niza.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, declaró ayer que el presidente Obama ha ofrecido toda su cooperación al presidente francés en materia de seguridad, ya que “después de todo, Francia es nuestro aliado más antiguo”, y añadió que los servicios de inteligencia y las fuerzas antiterroristas de Estados Unidos se encuentran en contacto.
Obama sostuvo que el atentado “es una amenaza para todos”, ratificando la determinación de su Gobierno para luchar contra el terrorismo internacional. “Es un abominable ataque contra la libertad y la paz que tanto apreciamos”, dijo. “Pero no nos rendiremos. No cederemos”, subrayó. Obama ya envió un telegrama a Hollande el jueves por la noche en el que destacó “la extraordinaria resistencia y los valores democráticos” de Francia.