La Eurocámara reclama a Maduro la inmediata liberación de presos políticos

El Parlamento Europeo reclamó ayer al Gobierno de Venezuela y a Nicolás Maduro que respete el Estado de Derecho y el principio de separación de poderes, al mismo tiempo que exigió la liberación inmediata de todos los presos políticos del país.
La resolución, pactada por el Partido Popular Europeo (PPE), la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D), el grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) y la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE), fue aprobada con 501 votos a favor, 94 en contra y 73 abstenciones.
Los eurodiputados recordaron al Ejecutivo de Nicolás Maduro que la no interferencia de poderes igualmente legítimos “es un principio básico” de países democráticos e instaron a las autoridades públicas a respetar la Constitución, incluido el procedimiento legal que permite convocar un referéndum revocatorio antes de que finalice el año.
En este sentido, la Eurocámara lamentó el bloqueo institucional, así como el control del Ejecutivo sobre el Tribunal Supremo y el Consejo Nacional Electoral para “impedir la aplicación de las leyes e iniciativas adoptadas por la Asamblea Nacional”.
Además, los eurodiputados expresaron su “grave inquietud” ante el “deterioro serio de la situación” en aspectos como la democracia, los Derechos Humanos y el escenario socioeconómico en el país, en un clima de inestabilidad política y de tensión social, causada por la escasez de bienes básicos, como alimentos y medicina.
A este respecto, la Eurocámara instó a la Alta Representante de Política Exterior, Federica Mogherini, a proponer un plan de asistencia para Venezuela y urgió a las autoridades del país sudamericano a permitir la entrada de ayuda humanitaria y a garantizar el acceso a las organizaciones internacionales que quieran asistir a los sectores más afectados de la sociedad para aportar los bienes más básicos y urgentes.
La eurodiputada de Podemos Tania González, cuya formación se abstuvo en la votación, criticó que la resolución “se ha convertido en un instrumento para el beneficio electoral de terceros” y que desvía el foco “de lo que debería ser esencial: las personas”.
Así, González apuntó que los grupos que han pactado el texto “han impedido la aportación de otros grupos” y que el documento final “dista mucho” de tener como objetivo contribuir al diálogo tras “el rodillo de la gran coalición”.
“Consideramos que todas las partes deben implicarse en la promoción y el respeto a los Derechos Humanos”, dijo la europarlamentaria, antes de indicar que es “fundamental” hacer una llamada al diálogo y la distensión”, insistió.
A su vez, el eurodiputado de Izquierda Unida Javier Couso criticó que la resolución “está dentro de la agenda española” a pocos días del inicio de la campaña electoral, y explicó que su formación votó en contra al considerar que la resolución “incurre en muchas falsedades”, como afirmar que no existe la separación de poderes en Venezuela, entre otras.