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martes | 16 abril | 2024
El barcelonés Marc Pons y su pareja Itxaso Ariza, supervivientes del tifón “Haiyan” en Filipinas que han regresado a España, pidieron que los ciudadanos se movilicen y envíen donaciones para la población afectada, especialmente en Tacloban.
“La situación en Tacloban es apocalíptica”, manifestó Marc Pons, antes de afirmar que “va a pasar mucho tiempo antes que se normalice” la zona.
Según explicó, “los servicios de emergencia van desbordados porque muchos efectivos no están disponibles”. Por esto pidieron la máxima colaboración de los españoles con la Cruz Roja, Naciones Unidas o asociaciones filipinas. “Tuvimos mucha suerte al estar en un hotel que resistió al desastre”, comentó Pons, quien agregó que “cuando la gente llegó buscando refugio” él y su pareja se percataron de las consecuencias del tifón.
Precisamente ayer, otros dos aviones –uno de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Aecid) y otro de Cruz Roja Española– partieron hacia Filipinas con ayuda humanitaria y material médico.
Mientras, el Gobierno de Manila confirmó ayer a la ONU que el tifón dejó 4.460 muertos y casi 12 millones de afectados. Además, el Ejecutivo se defendió de las críticas recibidas por la lentitud con la que está haciendo llegar la ayuda humanitaria a las víctimas del “Haiyan” y, tras reconocer que se ha visto superado por el desastre, garantizó la llegada masiva de suministros en las próximas horas.
El Gobierno consiguió restablecer la mayoría de comunicaciones por carretera y por mar, y aumentar la capacidad de transporte por vía aérea, que se efectúa a través de los aeropuertos de Cebú y Guiuan. Sin embargo, la senadora filipina Nancy Binai expresó su preocupación por el aumento de las violaciones y maltrato de mujeres y niños en las zonas afectadas.
Por su parte, el Partido Comunista de Filipinas, brazo político del grupo rebelde Nuevo Ejército del Pueblo, ordenó ayer a sus combatientes cesar los ataques contra las autoridades en las provincias devastadas por el tifón. n
