El ex presidente egipcio Hosni Mubarak entró ayer a última hora de la noche en situación de muerte clínica, según informó la agencia oficial de Egipto Mena, y otras como Reuters y France Press.
Mubarak fue trasladado a un hospital militar en El Cairo desde la prisión en la que cumple condena a causa del grave deterioro de su salud, después de que los médicos de la cárcel de Tora trataran durante dos horas de eliminar un coágulo cerebral, sin conseguirlo, según la agencia oficial Mena.
Según fuentes médicas “Mubarak fue declarado clínicamente muerto” al poco de llegar al hospital militar de Maadi. “Su corazón dejó de latir y fue sometido a una reanimación con desfibrilador pero no hubo respuesta”, según una fuente médica consultada por Reuters.
Mubarak está condenado a cadena perpetua por su complicidad en la muerte de manifestantes durante las revueltas que llevaron a su renuncia, en febrero de 2011. n