El asalto al Capitolio refleja el complejo legado que deja Donald Trump a Biden

Donald Trump dejará el poder el próximo miércoles con un claro legado: la erosión de la confianza pública en las instituciones de Estados Unidos, una mecha que quemó lentamente durante cuatro años, que estalló con el asalto al Capitolio y que promete seguir activa con Joe Biden en el poder.

Desde su primera campaña electoral, Trump fue dirigiendo guiños a los supremacistas blancos y otros extremistas de ultraderecha que le respaldaban, en una dinámica peligrosa que desembocó en el ataque al Congreso y que difícilmente se frenará simplemente con la llegada de Biden a la Casa Blanca.

“La cerilla que encendió el presidente ha iniciado un periodo peligroso en la historia de Estados Unidos. Las llamas arderán durante un tiempo antes de extinguirse”, afirmó el académico de la Universidad de Kentucky, Richard Waterman.

Mientras a otros presidentes se les recuerda por sus logros legislativos o las guerras en las que se metieron, el legado de Trump estará atado por encima de todo a su afán de provocación, su desdén hacia la verdad y su tendencia autoritaria, que culminaron en un reto sin precedentes al resultado de las elecciones presidenciales del 6 de noviembre.

“Estas últimas semanas han sellado su destino en lo relativo a su legado”, afirmó una profesora de ciencias políticas en la Universidad Chapman de California.

“Cualquier logro político quedará ahogado por la violenta insurrección en el Capitolio y por sus intentos de dar la vuelta al resultado de las elecciones a pesar de la ausencia de pruebas creíbles” de un fraude electoral, añadió.

“Trump ha creado un culto de masas”, opinó Bruce Miroff, historiador presidencial en la Universidad de Albany (Nueva York). El éxito de ese movimiento dependerá en buena parte del rumbo que tome el Partido Republicano, que fue cómplice de Trump durante años y apenas empezó a experimentar una mínima fractura tras el asalto al Capitolio, como demuestran los diez congresistas conservadores que votaron a favor de abrirle un juicio político.

Al margen, los expertos mencionaron también la deriva aislacionista en la que colocó a Estados Unidos, que cerró las puertas a los inmigrantes, disparado la competición con China y ralentizado la acción global contra la crisis climática.

 

Alerta de la Policía

Por otro lado, un informe interno de inteligencia de la Policía del Capitolio en Washington advirtió tres días antes del asalto del pasado 6 de enero que el Congreso podría ser el objetivo de los seguidores de Trump, descontentos por los resultados de la elección, según medios locales.

“Los partidarios del actual presidente ven el 6 de enero de 2021 como la última oportunidad para anular los resultados de las elecciones presidenciales”, apuntó el documento, que indicó asimismo que “los objetivos de los partidarios de Trump no son necesariamente los manifestantes contrarios como lo era anteriormente, sino el Congreso mismo es el objetivo el día 6”.

El asalto al Capitolio refleja el complejo legado que deja Donald Trump a Biden

Te puede interesar