La Xunta exigirá un informe de evaluación a los edificios de más de 50 años

En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal con su gabinete, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha explicado que esta medida va enfocada a "dar garantía y seguridad" tanto a los residentes en estos inmuebles, como a los de los edificios colindantes, así como a posibles compradores e inversores.

Para ello se creará un registro en el que "cualquier persona puede consultar si dónde vive se cumple el requisito" y "tener la seguridad de que ese edificio está en condiciones óptimas de habitabilidad" gracias a un informe que se encargará a técnicos competentes en la materia.

Con intención de favorecer estas actuaciones, el Gobierno gallego pondrá a disposición una cuantía de 12,7 millones de euros para financiar estos trabajos, que involucran a aproximadamente unos 350.000 inmuebles en Galicia, el 23 % del total del parque de viviendas de la Comunidad.

No obstante, este decreto está todavía en una fase preliminar y debe ser sometido a información pública para que se presenten alegaciones al mismo, por lo que no ha trascendido todavía qué límite temporal se fijará para la realización de estos informes, aunque Núñez Feijóo ha anticipado que prevé que se dé "una entrada en vigor amplia" y con "plazos razonables".

En materia de patrimonio y vivienda, el Consello da Xunta también ha aprobado el primer manual existente en España para la instalación de fibra óptica en los cascos históricos de las ciudades, un asunto -ha explicado el presidente gallego- para el que todavía no existe una "solución estándar" y que genera diferencias competitivas entre diferentes zonas de las ciudades.

Este catálogo de soluciones técnicas cuenta con la aprobación de la Agencia para la Modernización Tecnológica de Galicia (Amtega) y de la sociedad de Redes de Telecomunicación Gallegas (RETEGAL), que, junto a los arquitectos, han participado en su elaboración a partir de un caso práctico como el de la ciudad de Santiago de Compostela.

La finalidad de esta iniciativa es "facilitar que los vecinos, las tiendas, los negocios de los cascos históricos" y demás agentes involucrados "puedan competir en igualdad" con sus homólogos de los ensanches y casar esta necesidad "con la preservación de la arquitectura".