11º-14º
jueves | 25 abril | 2024
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el del PSdeG, Manuel Vázquez, llegaron ayer a un acuerdo para que se puedan celebrar unas primarias consultivas que permitan a los militantes gallegos pronunciarse sobre a quién prefieren como líder del partido.
Según informaron a Efe fuentes socialistas, Rubalcaba y Vázquez cerraron ayer los flecos pendientes de este pacto, que permite la celebración de unas primarias experimentales el 1 de junio, en las que podrán votar los militantes, antes del congreso extraordinario del PSdeG, previsto para el 6 de julio.
Ahora, los socialistas tienen que desarrollar un reglamento que recoja todo lo acordado, para lo cual se dieron un plazo de quince o veinte días.
La fórmula consensuada posibilita la participación directa de los militantes en la votación del secretario xeral del PSdeG y, al mismo tiempo, respeta lo establecido en los estatutos del partido, que señala que la última palabra la tienen los delegados.
Las bases socialistas votarán las listas de candidatos y los delegados que los apoyan el 1 de junio
Ambas direcciones se dieron por satisfechas con el acuerdo, ya que en Ferraz son partidarios de favorecer la participación de la militancia y el PSdeG ve cumplido el mandato del último comité nacional del partido, que el pasado día 2 acordó por aplastante mayoría la celebración de una “consulta” a las bases sobre el nombramiento del líder.
En las próximas semanas se redactará un reglamento “ad hoc” que establecerá que las candidaturas para la elección de delegados que se presenten en las agrupaciones sean encabezadas por los respectivos candidatos.
La idea es que se abra un proceso se selección de precandidatos, que tendrán que presentar un número determinado de avales para confirmarse como candidatos y hacer campaña.
El 1 de junio será la votación y, en cada agrupación, los militantes votarán listas encabezadas por los candidatos que hayan pasado “el corte” de los avales y que incluirán también a los delegados que apoyan a cada uno.
Mediante una sola votación, las bases escogerán a los delegados que participarán en el congreso extraordinario de julio y dejarán claras cuáles son sus preferencias para liderar el partido.
El procedimiento permitirá perfeccionar el sentido del concepto “delegado”, aquel en quien los militantes delegan su voto en un congreso con un mandato expreso, así como reforzar la transparencia en la elección y evitar posicionamientos personales del delegado al margen de la voluntad de quienes le eligieron.
Aunque podrán presentarse otros candidatos que no hayan concurrido en las primarias, lo tendrán más difícil, porque, tal y como es preceptivo, tendrían que reunir el 20% de los avales de los delegados y, en teoría, estos estarán ya vinculados a las candidaturas que hayan optado a la consulta y no se hayan retirado.
El acuerdo cierra uno de los frentes de la ejecutiva antes de que se reúna mañana.
Rubalcaba ya avanzó una serie de medidas para intentar zanjar otra de las polémicas de los últimos días, la de la moción de censura de Ponferrada y anunció un refuerzo de las estructuras del partido y de los grupos para que no se repita.
