Una tromba de agua anega comercios y calles de Vilagarcía en cinco minutos

Cinco minutos de lluvia intensa y la marea alta bastaron una vez más para que Vilagarcía se convirtiera durante un tiempo en un caos. La tromba de agua anegó por completo el casco urbano y puntos críticos como Matosinhos o Fontecarmoa. Precisamente en estas dos zonas tuvieron que cortar calles los efectivos de Emerxencias y Protección Civil, que tuvieron una mañana de lo más movida.
También López Ballesteros, bajo el puente de la vía del tren, fue otra de las zonas cero en la que se hizo necesario un corte de tráfico. A primera hora de la tarde, la circulación estaba restablecida en todos los viales.
Al margen de la combinación de marea alta y fuertes lluvias, lo sucedido ayer deja de nuevo en evidencia el mal estado del alcantarillado de Vilagarcía.
Emerxencias tuvo que desatscar arquetas que desbordaron en Rey Daviña, Rodrigo de Mendoza, la Avenida da Marina, Agustín Romero, la glorieta de la Marina Española, Arapiles, Colon y el Parque da Xunqueira.
Los fallos de la asfaltado de Rosalía de Castro también complicaron la circulación, ya que se crearon importantes bolsas de agua, especialmente en la zona del cruce con el instituto.
Pero fue el casco urbano una de las zonas más afectadas por las inundaciones. Al poco de empezar a llover, la Praza de Galicia comenzó a encharcarse mientras la bolsa de agua en la esquina entre Conde Vallellano y Arzobispo Lago crecía a un ritmo vertiginoso. Diez minutos después era prácticamente imposible acceder al barrio de O Castro (único punto seco del centro) sin llenarse de agua hasta las rodillas. Lo mismo pasaba en Rey Daviña, que por minutos volvió a ser la calle del río para desgracia de hosteleros y comerciantes.
Estos fueron precisamente los grandes perjudicados y tuvieron que dedicar buena parte de la jornada laboral a retirar la mercancía mojada y a sacar el agua de sus establecimientos.

indignación
“Pasou o que tiña que pasar”. Así se manifestaba el presidente de la asociación O Souto tras encontrarse el centro socio cultural de O Souto completamente anegado. El problema reside en el mal estado de las canaletas de recogida de agua. Hace ya tiempo que el colectivo viene solicitando que se coloquen rejillas para evitar que estas tuberías filtren hacia el interior del centro sin que el Concello, titular de las instalaciones, se haga cargo de la actuación.
“Eu xa non sei se é desidia ou algo peor”, se lamentaba Abuín que recuerda que el centro cultutal “é un edificio de todos que custou unha chea de diñeiro”. El agua afectó al mobiliario de chapa, por lo que tendrán que comprar otro. Protección Civil acudió a desatascar las canaletas.