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jueves | 25 abril | 2024
Los dispositivos establecidos por la Guardia Civil para el control de drogas durante el puente del 15 de agosto dejaron un total de 93 pruebas positivas entre los 4.120 conductores examinados en la provincia de A Coruña.
Según informó ayer la agrupación de tráfico, los puntos se colocaron en las proximidades de las localidades donde se celebraban fiestas. Así, entre los 93 positivos, 66 conducían bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
Por su parte, otros 20 dieron positivo en el test de drogas y siete fueron puestos a disposición judicial por superar la tasa de alcohol de 0,6 miligramos por litro y otro por negarse a realizar la prueba.
Además, se instruyeron dos atestados por carecer de permiso de conducir, uno de ellos no lo había obtenido nunca y el segundo por no tenerlo en vigencia en el momento.
La Guardia Civil destacó el caso de un taxista de Santiago que dio positivo en la prueba de alcohol y de cocaína después de un accidente en la vía local. En concreto, en el test de alcohol, el conducto registró 0,84 miligramos por litro en una primera prueba y 0,86 en la segunda.
Por otra parte, la Guardia Civil recordó las sanciones por conducir bajo los efectos de las drogas. En el caso del alcohol las multas oscilan entre los 500 y los 1.000 euros, así como la pérdida de cuatro a seis puntos. El resto de drogas suponen la pérdida de seis puntos y una multa que puede llegar hasta los 1.000 euros. En ambos casos pueden ir aparejados a penas de prisión de tres a seis meses, multas de seis a 12 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.
Por su parte, asociaciones de víctimas en la carretera y automovilistas se mostraron preocupados, tras la cifra de 17 fallecidos durante el puente del 15 de agosto, por la tendencia alcista que se ha mantenido a lo largo del año, y pidieron prudencia en las carreteras secundarias y también alertaron sobre los “accidentes de día”.
El presidenta de Automovilistas Europeos Asociados, Mario Arnaldo, explicó que las víctimas siguen aumentando en 2016 y actualmente hay “una preocupante subida del 10 por ciento en fallecidos y en accidentes con víctimas”.
Concretamente, destaca que en comunidades como Galicia, Comunidad Valenciana, Extremadura, Murcia o Andalucía, este aumento es alarmante.
A su juicio, esto “no se puede justificar solo con el aumento de movimientos” en la carretera que se están registrando en los últimos años, sino que también es consecuencia del estado de la red secundaria.
