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miércoles | 24 abril | 2024
El temporal de agua y viento, que causó olas de hasta cinco metros, pasó ayer por la costa de las provincias gallegas de A Coruña y Pontevedra sin provocar grandes incidencias
Galicia permaneció ayer en alerta naranja por fuertes rachas de viento en el litoral, según informó la Agencia Estatal de Meteorología.
Por ese motivo, desde la Xunta se advirtió de esta situación a instituciones y agrupaciones de Protección Civil con el fin de garantizar la seguridad de bienes y personas y que se adoptasen las medidas oportunas.
El servicio de Emergencias 112 no registró ningún incidente destacable, a excepción de un árbol que cayó en una carretera secundaria de la localidad lucense de Carballeda, o una señal de obras tirada en la AP-9 en Vigo.
Además, Salvamento Marítimo A Coruña y Fisterra recalcaron que “todo está bien” y “bastante tranquilo”.
De cara a hoy, el tiempo se mantendrá inestable con lluvias y vientos fuertes por la tarde y por la noche, pero habrá una tregua por la tarde con cielos despejados.
El viento soplará del oeste, moderado en general y con intervalos fuertes en toda la franja costera y en las zonas altas del interior, que rolarán a sur con rachas de muy fuertes mañana. Las olas podrán alcanzar los cinco y seis metros en todo el litoral.
Asimismo, las intensas lluvias caídas en Vigo provocaron inundaciones en diferentes zonas de la ciudad y causaron daños en al menos veinte vehículos, según informó la Policía Local.
Los mayores problemas se registraron en la calle de Julián Estévez, donde un turismo y un camión de la limpieza se vieron atrapados en una balsa de agua. Además, otros quince vehículos resultaron dañados en la zona.
A ellos se unen los desperfectos sufridos por otro turismo en la zona de Camiño da Fonte cuando una tapa de alcantarilla le alcanzó al salir con fuerza por la presión del agua.
Los efectivos de la Policía Local también tuvieron que actuar en otras inundaciones en Camelias con Bicentenario.
