El riesgo de la curva de Angrois no se analizó porque Adif no tiene metodología para ello

El peligro que suponía la transición de velocidad en la curva de A Grandeira, donde descarriló un tren Alvia en 2013 y murieron 80 personas, se habría analizado si Adif utilizase una metodología para evaluación de riesgos más moderna, según concluye el perito Enrique Castillo Ron.
En un escrito fechado el miércoles 12 y presentado al juez que instruye la causa por el accidente, este experto de la Universidad de Cantabria añade unos comentarios a raíz de la documentación aportada el lunes por el administrador ferroviario.

no muy adecuada
Así, como adenda, Castillo Ron destaca que “la información aportada indica, por primera vez, que se han realizado algunos análisis de riesgos, aunque sea de tipo preliminar, en la línea Ourense-Santiago”.
A continuación, resalta que “no queda claro que dichos análisis se hayan realizado concretamente ni para el caso del riesgo asociado a la transición significativa de velocidad ni para el riesgo asociado a la curva de A Grandeira, aunque sí hacen referencia a descarrilamientos”.
Respecto a la metodología aplicada, aunque señala que es “la que proviene de las normativas”, advierte de que “no es la más adecuada”.
El juez también unió al sumario las alegaciones del fiscal, Antonio Roma, al recurso interpuesto por la defensa del maquinista y por ahora único imputado en la causa, que demandó expulsar del procedimiento el informe anterior de Castillo Ron por entender que carece de imparcialidad.
El responsable del Ministerio Fiscal considera que “será preciso escuchar a los peritos propuestos por la Audiencia Provincial y admitir todas sus opiniones”.