“No he pegado a un cura. Soy creyente”, alega uno de los acusados de agredir a un párroco de Vigo

“No he pegado a un cura. Soy creyente”, alega uno de los acusados de agredir a un párroco de Vigo

Los dos acusados de agredir y robar en octubre de 2016 al párroco de San Xosé Obreiro y Santa Rita de Vigo, Antonio Rodríguez Suárez, quien como consecuencia sufrió importantes lesiones, negaron ayer ser autores de los hechos, y uno de ellos argumentó: “Yo estoy tranquilo, yo no he pegado a un cura. Yo soy creyente”.
El juicio se inició ayer y continuará hoy en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, donde las defensas de los dos acusados pidieron la libre absolución de sus patrocinados, Pedro Yago S.P. y Alison Lucas B.R., quienes permanecieron en la sala esposados y escoltados por agentes de la Policía Nacional.
El primero de ellos admitió en esta primera sesión que conoce al párroco “de hace tiempo” porque le cambiaba monedas, y, aunque en su primera declaración acusó de los hechos a Alison Lucas, este martes manifestó no poder “decir si fue él”. “No digo que sea o no sea él”, apuntó, antes de trasladar que cuando declaró por primera vez le “controlaba la droga”.
Además, dijo que aunque ambos son “mejores amigos, hermanos casi”, ambos pasaban entonces por “un momento malo”; y añadió que en presencia de una treintena de personas dijo que en la iglesia “hay dinero”, ante lo que mantuvo que el autor de estos hechos “tuvo que ser alguien al que –le dijo– eso”. “Yo tengo mi conciencia tranquila”, selló.
Por su parte, el segundo acusado admitió conocer la iglesia pero no al cura, y aseguró que no participó en el atraco. Durante sus respectivas declaraciones, ambos incurrieron en diversas contradicciones acerca de si el día de los hechos estuvieron en la iglesia y acerca de lo que hicieron el día de la agresión, entre otras cuestiones.

Declaración
Antes de arrancar la sesión y durante las declaraciones de Alison Lucas y de uno de los testigos, una de las juezas del Tribunal llamó la atención a Pedro Yago para que guardase silencio, avisándole de que en caso de insistir en su actitud le expulsaría de la sala.
Debido a que un informe forense determinó que la víctima “no se encuentra en condiciones de declarar” en el juicio, se leyó la declaración que realizó en fase de instrucción cuando estaba ingresado en el hospital.
Allí, el párroco inicialmente dijo no saber quién le pegó, aunque recordaba que fueron dos jóvenes y le pareció que “un chico que iba a cambiar monedas pudo ser el que le agredió”. Acto seguido, al enseñarle fotografías de los dos acusados, el hombre reconoció a dicho joven “sin género de dudas” como uno de los agresores, concretamente como el que le agarró. Ayer, un testigo que se encontraba junto a la iglesia el día de la agresión, manifestó que vio salir primero a un chico, luego a otro, y después al cura, “ensangrentado y como cayéndose”. l

“No he pegado a un cura. Soy creyente”, alega uno de los acusados de agredir a un párroco de Vigo

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