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sábado | 20 abril | 2024
Las dos manifestaciones de trabajadores del naval de Vigo concluyeron, tras confluir en el cruce de las calles Colón y Policarpo Sanz, ante la Agencia Europea de Control de la Pesca, con sede en esta ciudad, contra la que lanzaron botes de pintura y tornillos, y donde también quemaron dos contenedores.
Al concluir la asamblea en la que los portavoces sindicales convocaron una nueva jornada de movilizaciones en Vigo para el próximo jueves, varios operarios arrastraron los contenedores frente a la sede de la agencia y les prendieron fuego, y otros arrojaron botes de pintura, tornillos y piezas de fruta.
El paro comenzó a las 10.00 horas y los operarios de los astilleros que en estos momentos tienen carga de trabajo, además de los afectados por ERE y también extrabajadores del sector, se incorporaron a las dos marchas.
Aumentará la intensidad
Al concluir la protesta, Ramón Sarmiento, de CCOO, advirtió de que irán ganando en intensidad conforme se acerque el 17 de julio, fecha señalada para que el Colegio de Comisarios resuelva el expediente al tax lease.
Subrayó que “los ánimos se están calentando” y que “no contribuye a que nos calmemos todo lo que está pasando”: el aplazamiento para la próxima semana de la reunión del comisario Almunia con el Gobierno y las comunidades, o que este diga que la decisión está tomada y luego que hay margen para cambios.
Diego Atanes, de UGT, coincidió en que la virulencia de las protestas se incrementará la próxima semana. “Esto requiere más madera y mas concienciación”, proclamó Atanes, quien apeló a la ciudadanía a que repare en que “todas las actividades del sector servicios rinden gracias a la industria que genera empleo”.
Enfatizó que “la misión” de Competencia es “propiciar la lealtad” entre los Estados miembros y que los sistemas de bonificación del naval “nacen de la necesidad de competir con el sudeste asiático”.
Abundó en que “paralizando unos países y beneficiando a otros”, en alusión al tax lease español por denuncias de astilleros holandeses, “la UE demuestra que quien decide y que la fuerza están en el norte, pero no nos vamos a resignar. El naval va a dar la lucha en la calle”, advirtió.
culpa de la administración
Manolo Simón, de la CIG, señaló, por su parte, que es precisamente el comisario quien “defiende” al naval español. Sostuvo que Almunia “está de rodillas” pidiendo a los gobiernos centrales y autonómicos que “hagan algo, que les entreguen otros informes, que con los documentos que tiene sobre la mesa hay que devolver 2.800 millones, y lo viene avisando desde hace meses”.
Según Simón, desde la apertura del expediente “ni Gobierno ni Xunta hicieron lo que debían”, pues no pusieron en marcha un nuevo sistema de bonificaciones “como en Francia quince días, sino dos años después”, y entregaron toda la documentación en Bruselas el pasado mes de abril.
Nadie hizo caso
Recordó que hace mes y medio una delegación de la CIG viajó a Bruselas para interesarse por la tramitación del expediente y que un representante de Competencia les trasladó que se iba a obligar a reintegrar parte de la financiación que fue ilegal por considerarlas ayudas del Estado español, pero “nadie nos hizo caso”, recordó.
“Tuvo que salir Almunia y decir: 2.800 millones, ¡muévanse!”, para que las administraciones reaccionasen, razonó.
Con todo, confió en que las movilizaciones a nivel político y diplomático, y también en la calle, “den sus frutos”. n
