Los forenses aseguran que la presunta parricida de Noia “no tiene sentimientos por nadie”

Los forenses aseguran que la presunta parricida de Noia “no tiene sentimientos por nadie”
Mónica Juanatey permanece en el banquillo durante el juicio efe

Los forenses que declararon ayer en el juicio contra la madre acusada de ahogar a su hijo de 9 años en Menorca y esconder su cadáver en una maleta aseguraron que padece un trastorno antisocial y “no tiene sentimientos por nadie”, al tiempo que creen que dijo la verdad cuando confesó el asesinato.

Así lo señalaron los especialistas en el último día del juicio contra Mónica Juanatey. Cinco forenses se pronunciaron ayer tanto sobre las posibles circunstancias del fallecimiento del niño como acerca de las características psicológicas de la acusada.

Respecto al segundo aspecto, descartaron que la mujer padezca una enfermedad mental, pero sí un trastorno de conducta antisocial, que se caracteriza por que la persona es “deshonesta, con tendencia a mentir, irresponsable, manipuladora, superficial y que tiende a una violación de los derechos de otras personas”.

 

un carácter peligroso

Los especialistas creen que Mónica sufre de “frialdad afectiva”, es “inmadura” y “actúa sin pensar en los demás”, un carácter “que hace mucho daño y es peligroso”.

Sobre el móvil del asesinato, explicaron que encuentran “absurdo” que lo hiciera para preservar una relación sentimental que había comenzado en Menorca, ya que esta relación terminó al cabo de unos meses de la muerte del niño porque la acusada comenzó otra por internet con un hombre de Barcelona, con quien se casó luego en prisión.

Antes, recordaron, Mónica vivía en Galicia con un hombre con el que se iba a casar, que era el padre adoptivo de César y al que abandonó para irse a Menorca con su nueva pareja pero sin decirle que estaba con él.

En cuanto a si la mujer pudo sufrir amnesia en el momento de la muerte del niño, tal y como sostuvo en el juicio, los forenses lo descartan totalmente.

Por su parte, el fiscal mantuvo la petición de 20 años de cárcel por asesinato ya que la considera responsable de asesinato porque mató a su hijo César con alevosía y le aplica la agravante de parentesco.

El juicio ante el tribunal del jurado de la Audiencia de Palma finalizó ayer y queda en espera de veredicto, después de que tanto el fiscal como la defensa expusiesen de viva voz sus conclusiones. n

 

Los forenses aseguran que la presunta parricida de Noia “no tiene sentimientos por nadie”

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