La Xunta revisa 831 licencias de caza que podrían haber sido dadas de forma irregular

La Xunta revisa 831 licencias de caza que podrían haber  sido dadas de forma irregular
un cazador conversa con unos activistas efe/eliseo trigo

La Consellería de Medio Ambiente está revisando de oficio 831 licencias de caza concedidas de forma supuestamente irregular en los últimos años en la provincia de A Coruña, informó ayer ante el Parlamento el director xeral de Protección da Natureza, Ricardo García-Borregón.
El responsable del departamento autonómico compareció para responder a una pregunta del diputado socialista Pablo García, quien se hizo eco de la publicación en prensa de una investigación abierta en el servicio de protección de la naturaleza de A Coruña ante la posible expedición fraudulenta de licencias de caza.
García argumentó que se trata de un problema especialmente grave, dado que se trata de una actividad en la que se emplean armas, y subrayó que según la normativa específica para obtener el permiso es preciso pasar un examen y pagar unas tasas.
Además, indicó que desde la propia Consellería se ha admitido el incumplimiento de ambos requisitos en varios casos y destacó también la “estafa” que ha podido suponer a las arcas públicas al no haberse cobrado las tasas. Igualmente, calificó de “sorprendente” que la Consellería responsabilice únicamente a dos personas de este caso, mientras preguntó por las responsabilidades que puede tener el jefe del servicio de protección de la naturaleza, Carlos Muñoz, que –dijo el diputado– ha admitido que posee dos licencias “presuntamente obtenidas mediante este operativo” y no está claro que hubiese pasado el examen.
También preguntó si el presidente de la Diputación, Diego Calvo, obtuvo “alguna licencia de caza o pesca y no está lo suficientemente acreditado que hubiese hecho el examen o pagase las tasas”.
Aunque de este último caso Ricardo García Borregón no hizo mención, sí subrayó que es una “falacia” y “no hay ninguna licencia ilegal expedida” en el del jefe de servicio de protección de la naturaleza, ya que dispone de licencia desde el año 92, cuando no eran necesarias las pruebas.
Matizó que el examen para obtener licencia no entró en vigor hasta septiembre de 2007.

La Xunta revisa 831 licencias de caza que podrían haber sido dadas de forma irregular

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