El hijo de la anciana asesinada a golpes en Pontevedra no se cree las disculpas de los asaltantes

Familiares y agentes de la Policía declararon ayer en la segunda sesión del juicio con jurado que se celebra en la Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra contra Constante Sánchez Penelas y José Manuel González Cruz, autores confesos de la muerte a golpes de Pilar Fernández Otero, una vecina de la parroquia pontevedresa de Lérez de 87 años de edad, durante el asalto a la vivienda que habitaba sola.
Tras finalizar su declaración, uno de los hijos de la víctima se dirigió al tribunal para compartir una reflexión, pero la presidenta del mismo le dijo que “entendía” su petición, pero que “no procedía”.
De este modo, fue al término del juicio, fuera ya de la sala de vistas, donde este hombre trasladó a la prensa el mensaje que habría querido que escuchase el jurado en la sala referido a la confesión y el arrepentimiento mostrado por los acusados: “No me creo su perdón y es imposible que yo perdone por mi parte”, espetó.
Asimismo, el hijo de la fallecida aseguró en la jornada de ayer que no va a “descansar tranquilo” hasta que sepa que los dos acusados “cumplen la pena íntegra”.

Arrepentimiento
Constante y José Manuel, los presuntos asesinos, reconocieron los hechos relatados por la fiscal en su escrito de acusación, aunque sus defensas piden al jurado que tenga en cuenta su confesión y su arrepentimiento y que cometieron el crimen bajo los efectos de las drogas.
Ambos mostraron su arrepentimiento ante el tribunal y señalaron que su intención “no era hacerle daño”, pero “en ese momento estás drogado y no sabe lo que haces”.
La Fiscalía solicita 28 años y 6 meses de prisión para ellos como responsables de los delitos de asesinato, robo con fuerza en las cosas en casa habitada, robo con violencia en casa habitada, hurto y robo de vehículo. l