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martes | 23 abril | 2024
El municipio ourensano de Trasmiras tendrá su propia base de aviones no tripulados, gracias al programa militar firmado entre el Ministerio de Defensa y la OTAN.
En virtud de este acuerdo España entra en el programa NATO AGS de aviones no tripulados, aunque en un principio lo hará como socio secundario, lo que le permite comprar horas de vuelo de las mencionadas aeronaves.
Sin embargo, este acuerdo también posibilita la construcción de una gran base de aviones no tripulados (UAV) en Trasmiras. Con los aviones también llegarán alrededor de 7.000 militares de la OTAN al municipio ourensano.
Según informaba ayer “El Confindencial Digital”, “las Fuerzas Armadas españolas han firmado un acuerdo con la OTAN para integrarse en el programa AGS, siglas en inglés de Alianza de Vigilancia de Suelo”.
Después del escudo antimisiles de EEUU, este proyecto militar más ambicioso del mundo, y pretende estar operativo en 2017.
La misión > En concreto, “su misión es detectar, mediante aparatos no tripulados, movimientos de personas o vehículos sospechosos a largas distancias”, según informaba el mencionado medio de comunicación.
En la actualidad el centro de operaciones del programa NATO AGS se ubica en la base militar de Sigonella, en Sicilia.
La participación española en el proyecto se reducirá solo a la utilización “por horas” de las naves, ya que no contribuirá económicamente en la compra de los cinco aviones Northrop Grumman RQ4 “Global Hawk”, que son los más grandes del mundo y que tiene previsto comprar la Alianza.
Estos vuelos, que tienen carácter estratégico, se utilizan en misiones especiales como la guerra en Libia del año pasado.
La vuelta de España a este proyecto se produce seis años después de que el ministro de Defensa de entonces, el socialista José Antonio Alonso, decidiese la salida del país del programa, en respuesta por la negativa de la Alianza Atlántica de instalar una base de UAV en Zaragoza, lo que, según indicó en 2006 el Gobierno socialista, hubiera supuesto un revulsivo económico para la zona.
La nueva adhesión española supondrá ahora que Trasmiras acoja la base de operaciones de los aviones no tripulados para todo el Mediterráneo.
Esto será posible gracias que la actual ubicación en Italia tiene problemas logísticos. En concreto, es necesario cerrar parte del espacio aéreo cada vez que uno de estos aviones despega, lo que aumenta la saturación del cielo siciliano.
Además, EEUU ya ha dado su visto bueno al emplazamiento de Trasmiras, que también cuenta con el apoyo de la empresa fabricante de las aeronaves Nothrop Grumman, que, según “ECD”, revisó y evaluó la zona y alabó sus condiciones técnicas.
La construcción de la base, que albergará el Centro de Excelencia de aviones no tripulados en España, supondrá una inversión inicial de 250 millones, que sufragarán los socios del proyecto y las compañías privadas implicadas.
El proyecto se finaliza tal y como está previsto en 2017 la base de Trasmiras albergará un mayor número de efectivos que la de Rota. En concreto serán 7.000 entre militares y ingenieros, cifra a la que hay que añadir las familias de los mismos.
Por ello, la ubicación de esta base supondría un gran estímulo económico.
