Decretan prisión provisional sin fianza para el hombre que entró a tiros en un supermercado

El juez decretó prisión provisional comunicada y sin fianza para Carlos Stefano G., el hombre de 35 años detenido el pasado miércoles tras irrumpir con una escopeta en un supermercado de Ourense. Sin embargo, antes de ir a la cárcel este ingresará en la unidad de agudos del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) hasta que se estabilice su estado mental.
El detenido llegó ayer a los juzgados en un furgón policial con algo de retraso. A su entrada pasó a disposición de los servicios forenses, donde se le realizó un informe preliminar y se le detectó un “trastorno psicótico”.
Por este motivo, el juez decretó que Carlos Stefano G. no ingrese directamente en prisión, sino que se traslade a la Unidad de Agudos del CHUO para su diagnóstico y su estabilización en caso de que sea necesario. Cuando mejore su estado será enviado a la prisión de Pereiro de Aguiar (Ourense).
El detenido, que se negó a declarar ante el juez, está acusado de los delitos de daños, robo con intimidación, desorden público, tenencia ilícita de armas y atentado contra la autoridad. El varón se mantiene en silencio desde su detención policial el pasado miércoles.
Esta situación fue confirmada por el comisario jefe de la Policía Nacional de Ourense, Antonio Álvarez, que señaló que durante su estancia en la comisaría (hasta este viernes) el hombre “no ha realizado ninguna declaración”. 
Álvarez también incidió en la posibilidad de que su actuación haya sido “motivada por desequilibrios psíquicos” porque el móvil “no está claro” y tampoco se ha confirmado un motivo económico en su irrupción en el supermercado. 
El subdelegado del Gobierno en Ourense, Roberto Castro, señaló el jueves que el detenido no mostraba síntomas de arrepentimiento y se comportaba como si hubiera “realizado una hazaña”. 
En este sentido, también se manifestó el comisario jefe, que dijo que desde su detención el hombre “sigue en la misma situación compleja”, aunque confía en que “cuando pasen unos días, con asistencia médica irá reaccionando”.
El responsable policial confirmó que prosiguen las investigaciones y que se están analizando el teléfono móvil y el ordenador de Carlos Stefano G. para “ver si hay un fleco más” y buscar si ha existido “algún tipo de inducción que motivara al joven a actuar así”. n