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miércoles | 24 abril | 2024
Una explosión eléctrica en cadena en el socavón de unas obras que se están realizando en la calle Monasterio de Monfero, en el Ensanche A de Ferrol, derivó en una fuga de gas y un posterior incendio con llamas que llegaron a alcanzar la altura de un primer piso. El suceso, que causó gran alarma en el vecindario, movilizó a numerosos efectivos de la Policía Local, la Nacional y los Bomberos, pero, por suerte, no hubo que lamentar desgracias personales.
La primera de las explosiones se produjo en torno a las doce del mediodía y el propietario de la taberna Paspallás, José Mira Iglesias, fue el que alertó a los servicios de emergencia. Le siguieron otras dos o tres –los vecinos difieren en cuanto al número–, la última de ellas cuando ya se encontraban en el lugar de los hechos la Policía y el personal contraincendios del parque municipal de A Gándara.
Según explicó a este periódico José Mira, fueron explosiones muy sonoras, que se dejaron sentir en un amplio radio.
En los primeros momentos, los bomberos comprobaron que no había escape de gas y del socavón en el que el día anterior estuvieran trabajando unos obreros solo salía humo negro.
Una fuga > Sin embargo, a los pocos minutos se produjo una deflagración por una fuga de gas ciudad, que comenzó a arder provocando unas llamas que llegaron a alcanzar la altura de la primera planta del edificio 47-49 de la calle Monasterio de Monfero. El incendio se mantuvo activo durante unos quince minutos y el intenso calor provocó que se derritiesen y cayeran a la calle en trozos las persianas del primer piso, pero también se vieron afectadas las del segundo y el tercero.
Mientras tanto, los bomberos formaron una cortina de agua con dos mangueras para enfriar la fachada del inmueble, a fin de minimizar los efectos del fuego.
Según la información recogida al respecto, las explosiones se produjeron en el socavón abierto en la calle para realizar una conexión de alta tensión, de 15.000 voltios, en la que los operarios habían estado trabajando el día anterior. Posiblemente fueron provocadas por un cortocircuito y se cree que el incendio del cableado afectó a la tubería subterránea del gas ciudad, provocando que, debido al recalentamiento, se produjese una fuga.
A pesar de que el suministro se cortó de inmediato, el gas acumulado en las tuberías estuvo ardiendo cerca de un cuarto de hora.
Los agentes de la Policía Local y la Nacional acordonaron la zona para evitar que los grupos de personas que se agolparon en las calles adyacentes corriesen peligro, al tiempo que advertía a los vecinos más próximos al incendio de que mantuviesen las ventanas cerradas.
No llegó a haber desalojo de las viviendas, puesto que se consideró que los bomberos tenían la situación controlada, pero, pese a ello, los vecinos se concentraron en las escaleras y salieron precipitadamente una vez que se extinguieron las llamas.
El concejal de Seguridad dde Ferrol, Pablo Cal, manifestó que había sido debidamente informado por los jefes de la Policía Local y los Bomberos y que, afortunadamente, solo hubo daños materiales en la fachada del inmueble más próximo al lugar del incidente.
Pablo Cal explicó, asimismo, que el suceso pudo deberse a que la compañía Fenosa le dio carga eléctrica al cableado subterráneo que se había instalado el día anterior, añadiendo que ayer por la tarde los operarios reanudaron los trabajos en la zona afectada.
