Los agentes usan maquinaria pesada para registrar la finca del Queen’s

Un grupo de investigadores de varias unidades de la Guardia Civil volvió a registrar ayer el Queen’s, el local de alterne que acabó por convertirse en el epicentro de las pesquisas de la llamada operación “Carioca”, que desmanteló una supuesta red de prostitución y proxenetismo en la que estaban presuntamente implicados varios agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Hasta aquí todo normal. A primera hora de la mañana comenzaba el despliegue policial. Horas más tarde se sumaban nuevos efectivos al mismo y finalmente se sumaron también al nuevo registro, que ordenó la titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Lugo, Pilar de Lara, una excavadora y un tractor equipado con una pértiga desbrozadora, similar a los que se utilizan para limpiar las cunetas de las carreteras.
La propia instructora se incorporó al registro a media mañana, en torno a las once y cuarto, aunque antes cuatro furgonetas con agentes de la Guardia Civil y equipamiento habían entrado ya en el recinto del local del alterne situado a las afueras de Lugo.

Vigilancia
Además de los agentes que se harán cargo del registro, que según fuentes consultadas pertenecen a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y a la Policía Judicial, otros guardias uniformados vigilaban los accesos al club de alterne para que nadie se acercase a las inmediaciones del Queen’s.
De hecho, los agentes uniformados de la Guardia Civil, que llegaron en cinco coches patrulla, cortaron directamente la carretera de acceso al club de alterne, donde ya se encontraba a esas horas, en compañía de su abogado, el principal imputado de la operación “Carioca”, José Manuel García Adán.

“demasiado genérico”
El propio abogado del antiguo propietario del Queen’s, Manuel Ortega, declaró a los medios de comunicación que tanto él como su cliente desconocían con exactitud qué busca la jueza instructora con este nuevo registro, porque el auto con el que ordenó estas nuevas diligencias es demasiado genérico.
En todo caso, Ortega manifestó que sería extraño que apareciese en esa búsqueda algo que pudiese resultar comprometedor para su defendido después del registro exhaustivo que ya se había realizado hace algunos años en el local, también por orden de la misma jueza Pilar de Lara.
Sin embargo, en este caso esta diligencia se activó después de que una de las testigos hiciese un reconocimiento del lugar, aunque lo hizo en dependencia judiciales.
Fuentes próximas a la investigación no descartaron que en el registro se pudiera emplear incluso un georradar, para buscar restos humanos.
Aunque dicha información no fue confirmada por fuentes oficiales, podría explicar la presencia de maquinaria pesada para realizar excavaciones en la finca del Queen’s.
La utilización de ese aparato estaría relacionada con la sospecha que planeó sobre la operación “Carioca”, a medida que los agentes del caso avanzaron en la investigación, con respecto a la posibilidad de que en ese mismo local de alterne fuese perpetrado un homicidio, en concreto de una de las prostitutas que trabajaba en el Queen’s.
La “Carioca” desmanteló una supuesta red de prostitución y proxenetismo en la que estaban presuntamente implicados varios agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y que desencadenó casos como “Campeón” o “Pokémon”.