Aduanas sospecha del amaño de contratos de obras por parte de Liñares en la confederación del Miño-Sil

Los funcionarios de Vigilancia Aduanera que se hicieron cargo de las investigaciones en la operación “Pokémon” sospechan que el expresidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), Francisco Fernández Liñares, pudo haber amañado los contratos de diversas obras del organismo de cuenca a cambio de favores personales.
Según figura en el sumario, los investigadores sospechan que entre el expresidente de laCHMS y uno de los dos socios de la empresa Movimientos de Tierras y Desbroces Gallegos existía “un presunto concierto previo” a la hora “de concurrir a los contratos de obra” licitados por el organismo de cuenca.
En concreto, de las llamadas telefónicas intervenidas y de los seguimientos realizados, los agentes de Vigilancia Aduanera sostienen que el propio Fernández Liñares mantuvo comunicación telefónica e incluso llegó a reunirse con uno de los socios de la empresa para darle instrucciones sobre la documentación que había presentado para optar al concurso de obras adjudicadas por la CHMS.
De hecho, Fernández Liñares puso “sobre aviso” a ese socio de la empresa con respecto a las exigencias que se le iban a plantear por parte de la Confederación en relación con el sistema de “desinfectado de herramientas”.
A cambio, los encargados del caso sospechan que por orden de ese socio de la empresa, se estarían realizando “trabajos de reforestación y limpieza en alguna finca” propiedad del propio Fernández Liñares en las inmediaciones de Castroverde.
Esta empresa se hizo con adjudicación de dos obras del organismo en Lugo y León. n