El presidente del Parlament, Roger Torrent, exigió ayer al Gobierno del Estado “respeto” a la propuesta de investir a Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, mientras que Junts per Catalunya (JxCat) pidió al Tribunal Supremo que anule el recurso estatal.
Poco después de que el Consejo de Ministros autorizara al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, recurrir ante el Tribunal Constitucional la propuesta de candidatura de Puigdemont a ser investido president, Torrent compareció en el Parlament para subrayar que, pese a las “amenazas”, mantiene el pleno del martes.
Requisitos legales
Torrent subrayó que Puigdemont “cumple todos los requisitos legales para ser candidato” y que la impugnación de su candidatura “no tiene ningún fundamento jurídico, y esto lo sabe –añadió– cualquier ciudadano que tenga unas mínimas nociones de derecho, y así lo expresó también el Consejo de Estado”.
Para Torrent, la impugnación es un “fraude de ley que atenta contra los derechos de los electores de Cataluña y contra los de los diputados”.
“No puede ser que el único mensaje que el Gobierno transmite a los catalanes sea el de que no han votado bien, que no han votado como ellos querían; esto es una enorme irresponsabilidad política, ya que significa querer ganar en los tribunales lo que no ganaron en las urnas”, denunció.
“El Gobierno español no está impugnando la decisión de un Parlament, de un presidente del Parlament, sino que está impugnando el voto de millones de personas, la voluntad de los diputados y el funcionamiento del sistema democrático”, expuso..
Torrent se preguntó cómo se puede impugnar la candidatura de una persona a la Presidencia si esta misma persona fue candidata a las elecciones y nadie lo puso en duda.
Llamada al diálogo
Torrent recordó que, desde que preside la Cámara, apeló al diálogo como principal vía para afrontar la política, y lamentó que, por el contrario, lo único que recibió del Gobierno central han sido “amenazas” contra sus decisiones.
Concluyó que, sin embargo, mantiene su apuesta por dialogar con el Gobierno central sobre la situación política en Catalunya: “Mantengo la mano tendida y la voluntad de hablar. Nunca dejaré de ofrecer esta mano tendida”.
Mientras tanto, JxCat presentó una petición ante el Tribunal Supremo para que, de forma urgente, anule el acuerdo del Consejo de Ministros de recurrir ante el TC la candidatura de Puigdemont a ser investido president.
De forma paralela, los 34 diputados de JxCat, incluido Puigdemont, presentaron otro escrito al Constitucional en que solicitan que no admita a trámite el recurso del Gobierno contra la candidatura de la investidura.
Además, JxCat estudia presentar una querella criminal –por presuntas “amenazas”– contra el Consejo de Ministros, al considerar que su recurso es “un ejercicio de intimidación de primera magnitud”, afirmó Josep Rull.
En sus escritos, los diputados de JxCat subrayan que el Gobierno alega que Carles Puigdemont no estará presente en la sesión, pero “tal deducción carece de toda certeza”.
“El candidato propuesto ha efectuado diversas declaraciones en las que no descarta comparecer personalmente en el Pleno convocado”, explican, y recuerdan que Puigdemont incluso renunció a delegar su voto. l