Muere una limpiadora durante el atraco a un banco en un pueblo de Toledo

Muere una limpiadora durante el atraco a un banco en un pueblo de Toledo
Una familiar de la víctima recibe consuelo en el lugar del suceso efe

  Mercedes Martín Cabrero, de unos 60 años y que limpiaba desde hace treinta en la sucursal que Caja Rural de Castilla-La Mancha tiene en Santa Cruz de Retamar (Toledo), falleció ayer a causa de un disparo efectuado por uno de los tres encapuchados que a primera hora de la mañana intentaron atracar la oficina.

Uno de los tres atracadores fue detenido horas después por la Guardia Civil cerca de esta localidad, de casi 3.000 habitantes, situada en el oeste de Toledo, a unos 60 kilómetros de Madrid por la autovía A-5.

El suceso ocurrió pasadas las ocho de la mañana cuando los asaltantes, que iban encapuchados y armados con pistola, sorprendieron a las tres empleadas de la entidad y el director territorial de zona –que en la jornada de hoy visitaba esta sucursal– cuando llegaban a la oficina, según relató el responsable de prensa de la entidad, Javier Rodríguez.

Los atracadores les introdujeron en una sala y les amordazaron. Desde allí pudieron escuchar el disparo que ha acabado con la vida de Mercedes, que, llegaba en ese momento a la sucursal, de la que tenía llave. Las primeras hipótesis apuntan a que los delincuentes se pudieron nerviosos al verse sorprendidos por la llegada de Mercedes y reaccionaron disparándole.

 

Huida > Tras cometer el crimen, los tres asaltantes huyeron en una furgoneta blanca, al parecer, en dirección a la vecina localidad de Fuensalida, donde la Guardia Civil montó un fuerte dispositivo policial gracias al que se pudo detener a uno de ellos.

El alcalde de esta localidad de la comarca de Torrijos, Alberto Emmanuel Fernández González, explicó a los periodistas que algunos vecinos vieron huir a los asaltantes, e indicó que no eran conocidos del pueblo ni de la zona y que les vieron ayer por el pueblo.

El regidor convocó a primera hora de la tarde a la corporación municipal en un pleno extraordinario para decretar tres días de luto oficial por este “terrible suceso”, que ha conmocionado al pueblo, según dijo el regidor.

“Que estés una mañana en tu casa y que te digan que tu madre o tu esposa ha muerto de un disparo en un atraco es terrible”, comentó el alcalde.

La mujer fallecida no era de la plantilla de Caja Rural, sino que estaba contratada por una empresa de limpiezas, aunque en la entidad era considerada como una empleada más, ya que llevaba treinta años trabajando en la sucursal, donde también limpió su madre, según relataron los vecinos del pueblo.

En esta idea insistió el presidente de la entidad financiera, Andrés Gómez Mora, que tras conocer el suceso trasladó su pésame a la familia de la fallecida y manifestó su indignación por lo ocurrido, pues –dijo– “no hay ningún derecho ni justificación” para arrebatar la vida a una persona, que “sentíamos como nuestra”.

La fallecida, vecina del pueblo y que trabajaba para la empresa de limpiezas Eulen deja esposo y una hija periodista, Marta Fernández, de 34 años, amiga del alcalde, que trabajó en “El Día de Toledo” y que desde hace un tiempo se encuentra en el paro.

Los vecinos, que se congregaron en torno a la sucursal tras conocer el suceso, mostraron su consternación.

La sección sindical de UGT expresó también en un comunicado su más sentida condolencia y solidaridad para con la familia de la víctima y lamentó el fallecimiento de una trabajadora de la limpieza en un “nuevo accidente laboral”.

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