Los Mossos defienden su actuación mientras se desdibuja el móvil yihadista

Los Mossos defienden su actuación mientras se desdibuja el móvil yihadista
David Martínez Cubells, abogado de la familia del hombre abatido | a. garcía (efe)

Los Mossos d’Esquadra defendieron ayer su reacción “proporcional” al abatir al asaltante de la comisaría de Cornellá, mientras cobra fuerza la hipótesis de que el fallecido buscó su suicidio por una crisis personal, sin que consten vínculos con el yihadismo.
La Audiencia Nacional sigue investigando el ataque de ayer a la comisaría de los Mossos d’Esquadra de Cornellá de Llobregat (Barcelona), al no descartar la intención terrorista del abatido, aunque la Fiscalía sospecha que el asaltante buscaba una “redención religiosa” por la grave crisis personal que atravesaba, según han apuntado a Efe fuentes cercanas a la investigación. En esa hipótesis resulta clave la declaración de la exmujer del fallecido, quien dio detalles sobre el estado anímico y psicológico del hombre abatido por los Mossos y afirma que, antes de morir, le envió un mensaje telefónico en que le anunciaba que se iba a ir “Insha’Allah (si Dios quiere), al gran sitio que está arriba”.
Hasta ahora, los investigadores no tienen constancia de que el fallecido perteneciese al Dáesh ni, a la espera de analizar todo lo incautado, se ha hallado en su domicilio material relacionado con la organización terrorista, aunque sí un texto manuscrito, que podría ser la última oración que rezó antes de dirigirse a la comisaría de Cornellá armado con un cuchillo. “Oh Dios, te pido clemencia de tu sabiduría y pido clemencia de tu poder y te suplico a tu gran generosidad si sabes que este asunto va en contra de mi religión y de mi sustento aléjalo de mí y haz que mi destino sea bueno y haz que lo acepte”, reza el texto, publicado ayer por la Cadena Ser.
Las primeras hipótesis de la Fiscalía apuntan a un hombre que, movido por la vergüenza que sentía al ser homosexual, se refugió en la religión y comenzó a ser más extremo en la práctica del islam, de forma que con el ataque pudo intentar redimirse desde un punto de vista religioso y morir así “con buena fama”.

Los hechos
Por ese motivo, las pesquisas apuntan a que el abatido intentó atentar en la comisaría de los Mossos, buscando su muerte en lo que se conoce como un “suicide by cops” (suicidio a manos de la policía), método que consiste en amenazar deliberadamente a los agentes para forzar su reacción y así morir abatido.
Según revela la grabación de las cámaras de seguridad de la comisaría, el asaltante se abalanzó sobre la mossa de la recepción en cuanto entró en la comisaría con la clara intención de clavarle el cuchillo y, al zafarse ella de la agresión, la siguió por las dependencias policiales con el propósito claro de atacarla. En total, la agente disparó en cuatro ocasiones al asaltante, si bien solo tres impactaron, según las fuentes. l

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