Los Mossos abandonan los encierros pero amenazan con endurecer sus protestas

  Los Mossos d’Esquadra que se encerraron el viernes en la comisaría de la Policía catalana de la plaza de España de Barcelona abandonaron el encierro hacia las 10.30 horas de ayer, tras pernoctar en ella y amenazar al Departamento de Interior con endurecer sus protestas si no se aviene a negociar los ajustes.

Una cincuentena de agentes de los Mossos d’Esquadra irrumpieron la mañana del viernes en la recepción de la comisaría central del Eixample y unos treinta de ellos decidieron pernoctar en el vestíbulo, aunque sin entorpecer la atención al público y la labor policial de sus compañeros. Los encierros de policías autonómicos, que según los sindicatos han sido “espontáneos”, también se produjeron en las comisarías de Lleida, Girona, Badalona, Vic, Pineda, Figueres, Manresa, Cornellá y Vielha, según indicó el delegado del Sindicat de Mossos d’Esquadra, Antoni Castejón.

Los Mossos d’Esquadra protestan por los recortes salariales anunciados por el departamento de Interior y por la falta de recursos, como los chalecos antibalas ligeros.

Como medida de protesta, los policías autonómicos acordaron el viernes en distintas asambleas cumplir estrictamente los protocolos policiales y dejar de utilizar el catalán en sus comunicaciones internas.

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