Iberia quiere iniciar cuanto antes la negociación de las medidas de productividad

El consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez-Lozano, señaló hoy que la compañía tiene la intención de iniciar cuanto antes el proceso de negociación de las medidas de productividad que recoge la propuesta de acuerdo del mediador en el conflicto en la compañía, el catedrático Gregorio Tudela.
Los sindicatos mayoritarios y la empresa firmaron hoy el acuerdo, que además de rebajar a 3.141 los despidos y aplicar el ERE 72/01 en vigor que prioriza las prejubilaciones, establece un ajuste salarial directo del 7 % para el colectivo de Tierra y del 14 % para el de Vuelo.
Asimismo, en el plazo de un mes desde su firma, debe negociarse la mejora de productividad de los distintos colectivos, estableciéndose para el caso de no alcanzarse acuerdo un incremento de 4 puntos del ajuste salarial.
Sánchez-Lozano explicó que se trata de un "incentivo" que ha puesto el mediador para que efectivamente las partes "nos pongamos a negociar medidas de productividad y seamos serios al respecto".
El consejero delegado de Iberia añadió, en una conferencia telefónica con los medios, que la convocatoria a los sindicatos va a ser inmediata, que "mañana mismo, si podemos, tengamos ya reuniones, porque el plazo que parece largo, de un mes, tiene la Semana Santa por medio".
A su juicio, hay que convocar rápidamente a todos los sindicatos para discutir esas medidas de productividad que además son diferentes para cada colectivo, y confió en que todas las partes "seamos capaces de llegar a un acuerdo en el período que nos ha dado el mediador".
Según Sánchez-Lozano, el mediador ha hecho un trabajo que ha permitido un paso importante, en el que todas las partes "hemos tenido que ceder una parte importante de nuestras aspiraciones".
A su juicio, es un acuerdo que está en buen camino, en camino de de futuro y que va a hacer de Iberia una compañía viable, rentable y competitiva.
En este sentido, explicó que el problema de Iberia es que no es competitiva y el acuerdo, a través de la reducción salarial y medidas de productividad, puede permitir que lo sea y ayudar a construir su futuro.
Asimismo, el reto de Iberia a partir de ahora es recuperar su empuje comercial y su "capacidad para recuperar el corazón de los clientes", que son los que más han sufrido durante las diez jornadas de huelga, cuyo coste el directivo estimó en 30 millones de euros, -3 millones por cada día de paro-.
En cuanto a la decisión de la compañía de respaldar la propuesta de Tudela, adelantándose incluso a los sindicatos, Sánchez-Lozano dijo que el consejo de administración de Iberia y su matriz IAG consideraron que se trataba de un acuerdo que "podría ser interesante para establecer la paz en la compañía, aunque por supuesto no culmina con lo que hemos pedido".
El consejo consideró que merecía la pena hacer una apuesta por el futuro y reconducir la situación laboral, añadió.
Preguntado por el papel del Ministerio de Fomento en el proceso, el consejero delegado indicó que entiende la preocupación del Gobierno ante la situación de conflicto creada en Iberia y "lo que ha hecho es una labor de intentar estar informado y de animarnos a todas las partes a llegar a un acuerdo. Y esa es la función que ha tenido el Gobierno", concluyó. EFE kot/br