10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
La Generalitat prosigue con los preparativos del proceso participativo y distribuyó las urnas en las comarcas de Lleida, al tiempo que garantizó que no se violará la ley de protección de datos porque el registro de votantes en la jornada de participación se destruirá tras el 9-N.
El director de operativo del 9-N de la Generalitat, Joan Cañada, explicó que las urnas, que se empezaron a repartir el pasado lunes, día 3, continuarán distribuyéndose hoy y durante los próximos días, pese a la suspensión cautelar del Tribunal Constitucional (TC).
sin los mossos
Mientras, presidente catalán, Artur Mas, llamaba a los catalanes a participar “sin miedo” en la nueva consulta del 9-N, tras lo cual intentará dialogar con el presidente Mariano Rajoy, aunque el Gobierno ya le alertó de que su camino está “fuera de la ley” y no deberá incluir a los Mossos d’Esquadra.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, se mostró convencido de que los Mossos “cumplirán y harán cumplir la ley” y dijo que Mas “ya sabe a lo que se arriesga” cuando “inicia un camino que está fuera de la ley”.
Por su parte, los sindicatos de los Mossos admitió que hay “confusión” en las comisarías ante la falta de concreción de cuál será su función el 9-N, por lo que exigen al departamento de Interior de la Generalitat que les dé “órdenes claras” sobre su cometido.
El dispositivo policial para garantizar la seguridad ciudadana y el orden público durante la jornada será muy parecido al de la Vía Catalana de la Diada de 2013, cuando se movilizaron un total de 6.823 agentes.
En este contexto, el presidente catalán animó a acudir a votar el 9-N no sólo por una cuestión de pronunciarse sobre la independencia, sino en “legítima defensa de un pueblo entero”, el catalán, ante un Estado que actúa con “menosprecio”.
Mas apeló a la “serenidad”, con el fin de “desdramatizar” la polémica del 9-N. También consideró que la Generalitat, al acudir al Supremo para denunciar al Gobierno, defiende derechos fundamentales.
