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jueves | 25 abril | 2024
El príncipe Felipe destacó ayer, en la inauguración de la línea de AVE Barcelona-Girona-Figueres, que la alta velocidad es un elemento de cohesión territorial, idea que compartió el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien ve estas infraestructuras como “vías de entendimiento”.
El viaje inaugural del AVE a Girona y Figueres lo realizó también el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que aprovechó la presencia de Rajoy y de la ministra de Fomento, Ana Pastor, para reivindicar el Corredor Ferroviario Mediterráneo y una mayor inversión del Estado en infraestructuras para Cataluña.
Don Felipe, Rajoy, Mas y Pastor realizaron juntos este primer trayecto, que permitió el reencuentro de los presidentes del Gobierno y de la Generalitat, tras tres meses y medio sin verse y con un pulso político en torno al debate soberanista catalán.
El tren partió puntualmente a las 11.00 horas de la estación de Sants de Barcelona y en tan solo 48 minutos llegó a Figueres, donde en un breve acto protocolario el Príncipe descubrió una placa conmemorativa.
Inmediatamente después, la comitiva volvió a subir al tren para dirigirse a la estación de Girona, donde se celebró un multitudinario acto institucional, al que asistieron también la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna, y la presidenta del Parlamento, Nuria de Gispert, entre otras autoridades.
En un discurso que pronunció en castellano y catalán, el príncipe destacó la importancia de la red de alta velocidad como un elemento de cohesión, vertebración territorial e impulso económico del país, y dijo que “juntando fuerzas” España afrontará mejor el futuro.
El presidente catalán reclamó una mayor inversión del Estado en infraestructuras para su comunidad
Aseguró, además, que la infraestructura del AVE ha convertido a España “en un modelo a imitar en el mundo entero”, y que la inversión en infraestructuras constituye un motor de crecimiento que mejora la competitividad de la economía, fomenta la generación de empleo y mejora la calidad de vida de los ciudadanos. “Pocas inversiones son tan rentables y tienen tanto efecto multiplicador”, subrayó.
Para el presidente del Gobierno, la inauguración del tramo de AVE entre Barcelona y Figueres permite “abolir distancias” y “unir territorios y para acercar a las personas”, ya que las vías férreas, dijo, “han sido como costuras capaces de acercar los más diversos territorios en aras de una voluntad común”.
En un momento en el que Mas abandera un proceso soberanista en Cataluña, Rajoy consideró que “si los del AVE son raíles de prosperidad, también son vías de entendimiento”, y que sólo estas vías de acercamiento permiten llegar “más lejos”.
Por su parte, el presidente catalán, Artur Mas, aprovechó la presencia de Rajoy y de la ministra Ana Pastor para reivindicar el Corredor Mediterráneo y la inversión en infraestructuras.
Sobre la puesta en marcha de la línea de AVE entre Barcelona y Figueres, Mas dejó claro que no es un privilegio, sino “un acto de justicia” ya que, según ha recordado, Cataluña es la región que más contribuye al PIB español mientras que es también el territorio del Estado que tiene una menor dotación en infraestructura pública.
Rajoy apuntó, por su parte, que “Cataluña es la comunidad que más inversiones ha recibido en el ámbito ferroviario” y reiteró la importancia del tramo Barcelona-Figueres como parte del Corredor Mediterráneo, una infraestructura que calificó como “clave” para la “franja costera mediterránea y España entera”.
El AVE Barcelona-frontera francesa entrará hoy en servicio con nueve trayectos diarios por sentido, de los cuales ocho conectarán con Madrid y dos servirán como enlace con el TGV que va a París.
Girona, la única capital catalana a la que aún no había llegado la alta velocidad, quedará de esta manera conectada con Barcelona en tan solo 37 minutos y con Madrid en poco más de tres horas y media.
No obstante, el AVE llega a Girona con ocho años de retraso, ya que estaba previsto que la alta velocidad estuviera en 2004.
