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jueves | 18 abril | 2024
El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación ha transmitido al embajador del Reino Unido en España, Giles Paxman, el “disgusto y malestar” por la visita que el príncipe Eduardo de Inglaterra, hijo pequeño de la reina Isabel II, hará a Gibraltar el próximo mes de junio.
El director general de Política Exterior y Asuntos Multilaterales, Globales y de Seguridad, Santiago Cabanas, convocó el martes al embajador británico en la sede del ministerio para trasladarle la queja.
En un escueto comunicado de la Oficina de Información Diplomática, se afirma que el director general, “en el curso de la conversación y entre otros temas, tuvo ocasión de trasladarle el disgusto y malestar del Gobierno por la prevista visita” de los condes de Wessex.
La reunión tuvo lugar al día siguiente de que el Ejecutivo gibraltareño diera a conocer que Eduardo de Inglaterra y su esposa, Sophie Rhys-Jones, visitarían el Peñón de Gibraltar entre el 11 y el 13 de junio, con motivo de los actos de conmemoración del 60 aniversario de la coronación de Isabel II.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, explicó que aunque la reunión con el embajador fue el martes, la nota de protesta se divulgó ayer una vez constatado el silencio del Gobierno británico.
Poco después, portavoces del Ministerio británico de Exteriores y del Palacio de Buckingham insistieron en que la visita que el príncipe Eduardo hará en junio a Gibraltar es parte de la conmemoración de los 60 años en el trono de su madre, la reina Isabel II, tras del “malestar” expresado por el Gobierno español. Las fuentes dijeron que varios miembros de la familia real inglesa están realizando viajes fuera del Reino Unido en representación de la reina con motivo de su Jubileo de Diamantes.
Se prevé que los miembros de la realeza británica “visiten cada reino, así como los países de la Commonwealth, dependencias de la Corona y territorios británicos en el extranjero”, agregó el portavoz, que no entró a valorar las críticas españolas.
