10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) volverá a intentar cerrar el próximo martes la elección de su presidente, siendo consciente del fracaso de no haber sido capaz de alcanzar un acuerdo tras dos días de reuniones y con la presión de las asociaciones judiciales que creen inaplazable el nombramiento.
A la reunión que el pleno del CGPJ celebrará el martes, los 20 vocales acuden con la intención de encontrar un candidato que consiga los doce votos necesarios para ser elegido, pero no parece fácil, ya que hasta ahora y a pesar de los numerosos contactos que han mantenido no han logrado un nombre que alcance ese consenso.
En las dos reuniones que el pleno mantuvo la semana pasada no apareció un posible presidente que reuniera esa mayoría de tres quintos que marca la ley para la elección del presidente del Poder Judicial y del Tribunal Supremo y, según algunas fuentes del Consejo consultadas por Efe, la situación no ha cambiado mucho.
Si todo se mantiene igual, en el próximo pleno, tres o cuatro de los vocales seguirán votando sistemáticamente en blanco, como han hecho con los más de veinte candidatos que hasta ahora han sido sometidos a votación, algunos de ellos sin que antes fueran consultados por su disposición a aceptar el cargo, según las fuentes del CGPJ.
Una situación que la vocal Margarita Robles reconocía la semana pasada como un "cierto fracaso" de los miembros del Consejo, que no están sabiendo dar respuesta adecuada a las exigencias de la carrera judicial y de la sociedad.
Detrás de esa incapacidad para elegir un candidato, algunas asociaciones judiciales ven también el interés del Ministerio de Justicia de dilatar la elección del presidente del Poder Judicial, después de proponer una reforma integral del CGPJ que pretende "subordinar el Poder Judicial al Ejecutivo".
Esa es la opinión del portavoz de Jueces para la Democracia (JpD), Joaquim Bosch, quien, en declaraciones a Efe, ha instado al ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, a no interferir en el proceso de elección del presidente del CGPJ y a los vocales a no dejarse influir por "presiones políticas".
Desde la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Pablo Llarena, ve "inadmisible" que el Consejo no pueda cumplir con su función constitucional de designar a su presidente, más allá de que se tome un tiempo de deliberación razonable para ello.
También el portavoz de la asociación Francisco de Vitoria, José Luis González Armengol, cree que la carrera judicial necesita el nombramiento "urgente" de un presidente, "rompiendo la situación interina de bicefalia" que se mantiene ahora, con Fernando de Rosa en la presidencia en funciones del Consejo y Juan Antonio Xiol en las mismas condiciones en el Supremo.
A esas voces se une la de Ángel Dolado, portavoz del Foro Judicial Independiente, que desea que los vocales demuestren su profesionalidad, elijan presidente y reivindiquen el Consejo como está concebido actualmente frente a la reforma anunciada por el Ejecutivo, que a su juicio supone "la muerte" de este órgano.
Frente a estas peticiones, el CGPJ defiende la complejidad del proceso de elección de presidente, especialmente ante la crisis sin precedentes que ha provocado en el órgano de gobierno de los jueces la dimisión de Carlos Dívar por el escándalo de sus viajes en fin de semana.
Parece complicado que hoy los vocales puedan alcanzar la misma unanimidad que lograron para elegir a Dívar en 2008, aunque será suficiente con doce votos que respalden al que será el presidente hasta septiembre de 2013, cuando concluye el mandato del actual Consejo.
En esa lista, los candidatos mejor situados estaban la semana pasada los magistrados del Supremo José Ramón Ferrándiz, expresidente de la APM; Carlos Granados, de la Francisco Vitoria y exfiscal general del Estado; José Manuel López García de la Serrana, Gonzalo Moliner o Joaquín Giménez, entre otros, pero ninguno pasó de una decena de apoyos.
