La dimisión de Pedro Antonio Sánchez como diputado, el último escollo para zanjar la crisis murciana

La permanencia de Pedro Antonio Sánchez como diputado puede ser un escollo para zanjar la crisis institucional de Murcia porque Cs es imprescindible para hacer presidente a Fernando López Miras y el acuerdo que firmó con los populares obligaría a que el expresidente deje su escaño. 
Tras la dimisión el martes de Sánchez como presidente de la Comunidad ante la certeza, según él, de que fuera a constituirse un “tripartito” entre PSOE, Podemos y Ciudadanos, el Gobierno de Murcia abrió ayer un periodo de interinidad, liderado por la consejera de Presidencia en funciones, María Dolores Pagán, que se cerrará la última semana del mes con la elección de un nuevo jefe del Ejecutivo.
La presidenta de la Asamblea, la socialista Rosa Peñalver, empezará hoy a programar sus encuentros con los cuatro grupos parlamentarios para conocer quién tiene más apoyos de cara a la investidura y, a la vista de lo avanzado ayer por el portavoz de Cs, Miguel Sánchez, negando la posibilidad de un gobierno de izquierdas, el candidato del PP designado por Pedro Antonio Sánchez cuenta con los 22 votos de su grupo y con el probable apoyo de Ciudadanos.
El portavoz parlamentario del PSOE, Rafael González Tovar, el único de los protagonistas de la política murciana aseguró que está “totalmente dispuesto” a hacerse a un lado si Cs apoya un gobierno de cambio en la Región, condicionado a que él no sea presidente. “Yo ya tengo una salida en Puente Tocinos para volver a trabajar de médico”, apuntó antes de insistir en que nunca será “un obstáculo” para lograr ese hipotético Gobierno alternativo.
El dirigente de Ciudadanos Miguel Sánchez, consultado por EFE, eludió pronunciarse sobre esa posibilidad y dijo que “Ciudadanos seguirá, como desde el principio, apoyando un gobierno del PP con un candidato alternativo a Pedro Antonio Sánchez”.

Revisión del pacto
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, reiteró por su parte que su partido está dispuesto a negociar con el PP en la Región de Murcia un pacto de investidura para los dos próximos años, un documento en el que espera “concretar la literalidad” del punto que determina en qué momento un cargo público salpicado por un caso de corrupción debe dimitir.
“Si el PP quiere sentarse otra vez para conseguir estabilidad en la región, tendremos que volver a hacer un acuerdo nuevo, que ya no va a ser para cuatro años, sino para dos años que quedan de legislatura”, declaró.
Mientras, el secretario general de Podemos y portavoz parlamentario, Óscar Urralburu, exigirá que el expresidente “entregue su acta de diputado” y a Ciudadanos que “no se hagan los tontos y se den cuenta de que es Sánchez y todo su equipo el que seguirá dirigiendo la Región, aunque la firma en el papel la ponga otro”.
A su juicio, el candidato del PP a la Presidencia de la Comunidad, Fernando López Miras, “es un títere para que Pedro Antonio Sánchez maneje los hilos”. l