Castro ordena investigar quién tomó la foto de la infanta en su declaración

El juez del caso Nóos, José Castro, ha ordenado a la Policía que investigue quién tomó la imagen de la declaración del pasado sábado como imputada de la infanta Cristina que publicó ayer en primera página el diario estatal “El Mundo”.
Según informaron fuentes judiciales, el titular del juzgado de instrucción número 3 de Palma de Mallorca planteó su petición directamente y de manera verbal al jefe superior de Policía de Baleares, Antonio Jarabo.
Castro había dictado un auto en el que prohibía expresamente el acceso a la sala de vistas en que declaró doña Cristina de cualquier dispositivo que permitiera la toma de imágenes de la imputada.

Medidas de seguridad
Para ello, estableció la obligación de que todas las personas que accedieron a la sala, unas cuarenta entre abogados defensores, fiscales, representantes de la acusación y funcionarios, depositaran bajo custodia policial antes de entrar sus teléfonos móviles, tabletas, ordenadores portátiles o cualquier otro dispositivo tecnológico que pudiera grabar imágenes o sonido.
Para prevenir una posible filtración, el juez había accedido además a la solicitud de la defensa de la infanta de que la declaración solo se grabara en audio para su posterior transcripción, pero no en vídeo como se había hecho en ocasiones precedentes, como con el marido de Cristina, Iñaki Urdangarin.
En la imagen publicada puede verse de espaldas a doña Cristina durante su comparecencia judicial, que se prolongó seis horas y media.
Tras su declaración, la infanta Cristina viajó a Madrid desde Palma, en un vuelo de la compañía Air Europa.
En Madrid, podría haber pernoctado en el palacio de la Zarzuela, donde podría haber visto a los reyes y trasladarles personalmente sus impresiones sobre la comparecencia judicial, si bien la Casa del Rey no confirmó ninguno de estos dos extremos. Tampoco confirmó cuándo abandonará Madrid, porque la Casa del Rey no informa sobre desplazamientos privados de los miembros de la Familia Real, pero es previsible que viaje hoy mismo a Ginebra, su actual ciudad de residencia, donde trabaja para la Fundación la Caixa.
Doña Cristina, que llegó ayer a Palma procedente de Barcelona, abandonó los juzgados de la capital balear poco después de las 18.10 horas y, antes de entrar en el vehículo en el que se trasladó al aeropuerto, se despidió sonriente de los periodistas.
En su comparecencia judicial, respondió durante cinco horas a las preguntas del juez y durante media hora a las del fiscal Anticorrupción, Pedro Horrach.