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miércoles | 8 mayo | 2024
Zara ha elegido la Quinta avenida de Nueva York para enseñar al mundo lo que los coruñeses ya conocen desde que Marineda City abrió sus puertas. El nuevo diseño de las tiendas, con espacios diáfanos, claros y luminosos que sorprendió en el macrocentro herculino deja ahora boquiabiertos a los neoyorquinos.
Los responsables de Inditex y los del estudio de arquitectura de la coruñesa Elsa Urquijo llevan alrededor de dos años trabajando en el diseño ahora revelado y que supone un salto cualitativo en la línea siempre ascendente que mantiene Zara desde su creación.
La ropa adquiere nuevo protagonismo y los percheros se aligeran de prendas para que las que quedan se vean realzadas. No hay lugar para la estridencia. Se ha cuidado hasta el mínimo detalle para conseguir que la acción de comprar se convierta en un placer.
Se repiten algunos conceptos como el de los cubos, que recuerda a las boutiques más íntimas, pero se llevan un poco más allá. De igual modo, numerosos sillones invitan a tomarse un respiro en cualquier momento.
El nuevo buque insignia de la firma gallega en Estados Unidos tiene en total más de 3.500 metros cuadrados, distribuidos en tres plantas. En la baja se encuentra la ropa de mujer mientras que en la primera está la de hombre. En el sótano se sitúan Zara Basic, Zara TRF y la ropa de niños y bebés.
El establecimiento es el séptimo de la compañía en Manhatan, la capital comercial de Estados Unidos, donde posee en total 47 puntos de venta, y, coincidiendo con esta apertura de puertas, cierra las de la antigua tienda que tenía en esa misma calle, pero con menos metros cuadrados, que se convertirá antes del otoño en el primer comercio de Massimo Dutti fuera de España.
El nuevo comercio de la firma gallega en EEUU tiene más de 3.500 metros cuadrados, distribuidos en tres plantas
La tienda del 666 de la Quinta avenida abrirá los siete días de la semana, en la misma trabajarán 450 empleados y, como siempre, la gran mayoría de los responsables proceden de la promoción interna. Ubicada en uno de los rascacielos más conocidos de Manhatan, el edificio Tishman, construido en 1957, cuenta con cinco escaparates y más de 23 metros de fachada. La empresa coruñesa pagó en su día alrededor de 240 millones de euros a su propietario para hacerse con ella, lo que supuso desalojar del local a la tienda oficial de la todopoderosa NBA.
Además, la empresa ha puesto especial atención en que se cumplan los criterios más estrictos de calidad medioambiental. Así, los diferentes sistemas elegidos permiten reducir el consumo de anual de energía en un 30%, usar un 70% menos de agua y reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera en más de 150 toneladas. Igualmente, el grupo coruñés se ha decantado por las bolsas de papel reciclado y de plástico biodegradables para envolver la mercancía.
El grupo Inditex, que cuenta con más de 5.500 tiendas en el mundo, está presente en más de 80 mercados con sus marcas Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home y Uterqüe.
