Los sindicatos de Arriva llegan a un acuerdo y desconvocan la huelga de forma definitiva

La huelga de Arriva para los jueves y viernes de este mes ha sido desconvocada de manera definitiva por los sindicatos después de haber suspendido la primera jornada, que tendría que haber sido la semana pasada.
CCOO y la CIG llegaron a un acuerdo con UGT para que todo el personal vote sobre la situación en que está la empresa.
CCOO y CIG explicaron que “mantienen su palabra y desconvocan la huelga para hacer un referéndum dado el artificial clima creado entre los trabajadores al respecto del seguimiento de la huelga, que puede llevar a un grado de tensión inaceptable para ambas centrales sindicales”. Además, hicieron un llamamiento a UGT para que “cumpla sus compromisos” y se firme un acuerdo completo, pues recuerdan que se puede volver a convocar otra huelga en un futuro.
Hay que recordar que la huelga general estaba convocada para todos los jueves y viernes de enero, empezando la semana pasada, pero entonces se aplazó para esta y finalmente no se hará ninguna jornada.
Los motivos de la huelga que habían convocado derivaban de la “política disciplinaria represiva y discriminatoria aplicada por la empresa” y por el deficiente estado de la flota de vehículos, según los sindicatos.
Además, denunciaban los “incumplimientos” en materia económica del convenio colectivo por parte de la empresa y las “continuadas irregularidades” en la contratación.
Por otro lado, respecto a la política en materia laboral que está llevando a cabo el Gobierno, CCOO y UGT de Cataluña no descartan la convocatoria de una nueva huelga general en España para protestar por el bloqueo de la negociación colectiva, sobre todo en los casos en que los convenios han entrado en período de prórroga, la ultraactividad.
El secretario general de CCOO en Cataluña, Joan Carles Gallego, acusó a las patronales de potenciar las desigualdades sociales mediante el recorte de los derechos de los trabajadores.
Rechazó que los costes laborales sean la causa de la crisis, y atribuyó los problemas económicos a la falta de innovación, a la poca cualificación y a las deficiencias organizativas de las empresas.