El primer prototipo del tren Talgo 350, conocido como el “pato”, que cubrirá la línea de alta velocidad que conectará las ciudades santas del Islam de La Meca y Medina, surcará por primera vez las arenas del desierto saudí en diciembre de este mismo año.
Dos años después de que un consorcio español, en el que figura la gallega Copasa, firmase en la capital saudí un contrato histórico de 6.736 millones de euros para hacer realidad el primer AVE del desierto, Renfe y Adif buscan repetir el éxito con un nuevo contrato ferroviario que se enmarca dentro del ambicioso plan de infraestructuras que prepara Arabia Saudí para los próximos años por un importe superior a 70.000 millones de euros.
Ambas compañías españolas pujan por la línea de ferrocarril Norte Sur (NSR), que con una extensión de 2.400 kilómetros, estará orientada al transporte de viajeros y minerales.
A la espera de que se cierre el plazo de presentación de ofertas a finales de marzo próximo, está previsto que una delegación saudí acuda la próxima semana a Madrid para analizar la oferta española para un proyecto que se espera entre en servicio en 2017.
Así lo anunció ayer la titular de Fomento, Ana Pastor, que encabezó una delegación española que se ha desplazado este fin de semana a Arabia Saudí para observar de cerca el avance de los trabajos del llamado AVE de los peregrinos y mostrar su interés por los nuevos proyectos que puedan surgir en el país. n