10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
El consejo de administración de Novacaixagalicia, que aprobó por unanimidad el pasado día 21 trasladar a la Xunta que ya había iniciado los trámites para convertirse en una fundación de carácter especial, llevaba trabajando en este proceso desde el pasado verano, cuando, en sus consejos del 28 de junio y 17 julio, aprobó la hoja de ruta que llevaría a la entidad a transformarse en dicha fundación.
Ayer, cinco meses después de esa aprobación, la Xunta constató que se debe dar ese paso, por lo cual, desde ayer, Novacaixagalicia es ya una fundación especial. La normativa estipula que, pasados cinco meses, si no se ha completado la conversión, esta ya es automática.
De esta forma, será preciso nombrar una comisión gestora o un patronato, ya que hasta ahora, la entidad ha quedado con una estructura superior a la que debería tener.
Precisamente ayer, la Consellería de Facenda dijo que la conversión supondrá un “importante ahorro de costes y de gestión”.
La nueva fundación especial tendrá los mismos fines y conservará las mismas líneas de trabajo y objetivos que en la actualidad. la caja continuará, pues, con normalidad su actividad, pero bajo otra forma jurídica más acorde con su dimensión y actividad, actuando de una manera más eficiente y operativa.
Esta fundación nace con un balance patrimonial equilibrado, conforme al plan trazado por la caja en su Plan Estratégico 2012-2016, y con el objetivo de la garantizar la sostenibilidad de la gestión de una red de 90 edificios y un Monte de Piedad que tendrá como desafío principal mantener y desarrollar su obra social.
Una actividad defendida en todo momento por todos los miembros de su consejo de administración que, según expresan, se sustenta en las cifras que se recogen en la memoria de actividades de 2012.
La entidad cuenta con 50.000 socios en los 12 centros de mayores que se distribuyen a lo largo de todo el territorio de la comunidad, y más de 100.000 personas han participado en diversas actividades de envejecimiento activo.
