El FROB quiere iniciar en septiembre los contactos para vender Novagalicia

El FROB quiere iniciar en septiembre los contactos para vender Novagalicia
El director general del FROB, el fondo de rescate español de la banca, Antonio Carrascosa, durante una entrevista con Efe. EFE

El proceso para que Novagalicia cambie de manos avanza a buen ritmo y ahora el FROB está a la espera de que concluya un análisis de la entidad encargado a un banco de inversión con el objetivo de iniciar ya en septiembre los contactos con potenciales compradores.

En paralelo, otro banco de inversión analiza Catalunya Banc para que una vez concluida la venta de Novagalicia pueda arrancar la del grupo catalán, con suerte, a finales de octubre si se cumplen las previsiones que maneja el FROB.

En una entrevista concedida a Efe, el director general del organismo, Antonio Carrascosa, ha explicado que los bancos de inversión contratados para analizar Novagalicia y Catalunya Banc están trabajando a pleno rendimiento.

Así, pone como ejemplo que ya ha habido varias reuniones en Vigo y Barcelona para coordinar los equipos de trabajos en las respectivas entidades.

El directivo calcula que es posible que en agosto se pueda tener culminado el trabajo interno necesario para poner a la venta el grupo gallego y luego, ya en septiembre, iniciar los contactos con los potenciales compradores.

Carrascosa insiste en que, además de la gran banca española, Novagalicia suscita interés entre algún inversor extranjero, concretamente, estadounidense, precisa.

Por eso, teniendo en cuenta que "ya ha habido muestras de interés claras por la entidad gallega", está convencido de que este grupo se podrá vender en la primera quincena de octubre para seguir, a continuación, con el proceso de Catalunya Banc.

Sin embargo, no aventura si habrá más ayudas públicas para cerrar el traspaso de estas entidades e insiste en que antes de tomar una decisión al respecto, primero hay que analizar aquellos aspectos que más dudas pueden generar a un comprador.

Entre esas cuestiones cita, por ejemplo, los traspasos realizados a Sareb, las pérdidas esperadas de algunas carteras de créditos o los activos fiscales diferidos con los que cuentan las entidades y que suman unos 10.000 millones.

Sobre esta última cuestión, Carrascosa espera que esté resuelta en las próximas semanas porque considera que el potencial comprador estaría dispuesto a ofrecer más dinero por Novagalicia o Catalunya Banc si sabe que podrá recuperar esos 10.000 millones.

Aún así, Carrascosa no oculta que hay una serie de elementos que el FROB sabe que a un comprador le genera incertidumbre y por eso dos bancos de inversión analizan los balances de las dos entidades y ven alternativas para mitigar el impacto de determinadas partidas.

En este contexto y fruto de los contactos con los interesados se abrirá la discusión de si habrá ayudas adicionales o no para la venta de las dos entidades nacionalizadas.

Al margen del previsible reconocimiento de los activos fiscales como créditos frente Hacienda, el máximo responsable del FROB admite que "puede ser recomendable ofrecer alguna garantía en el caso de carteras de crédito con esquema de protección de activos".

Preguntado por si puede ponerse en juego la competencia si Novagalicia y Catalunya Banc caen en manos de la gran banca española, Carrascosa se muestra convencido de que no habrá problemas y afirma que "todavía no hay excesiva concentración".

Recuerda que en España hay seis grandes bancos con implantación nacional, Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Popular y Sabadell, a los que se unen varias entidades regionales "potentes", como Ibercaja, Unicaja-CEISS o KutxaBank.

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