La evolución del crédito condicionará la estabilidad de la economía gallega

La evolución del crédito y la recuperación de las finanzas públicas son dos de las principales “incertidumbres” que condicionarán el futuro de la consolidación de la economía gallega.
En este sentido se pronunció ayer el economista Alberto Meixide, director y coordinador del vigésimo octavo número de la publicación “A Economía Galega. Informe 2013” bajo el patrocinio de Fundación Galicia Obra Social (Afundación) de la nueva entidad Abanca, durante la presentación del documento.
Meixide dijo que los datos señalan la superación de la recesión y los aún débiles síntomas de recuperación económica, pero precisó que “quedan incertidumbres importantes por aclarar y desequilibrios”.
Una de ellas es la evolución futura del crédito e indicó que en ello influirán de manera decisiva las medidas que al respecto se espera que adopte el Banco Central Europeo acerca del estímulo del crédito. También se refirió a otro “desequilibrio” determinante en la recuperación de la economía, como es la consolidación de las finanzas públicas, tanto en lo referido al déficit como a la deuda pública.
Meixide dijo que en los próximos años para incrementar la tasa de crecimiento económico hay que acompañar todo este proceso de recuperación con intervenciones importantes, como el gasto en I+D o la inversión en capital humano, entre otras.
En el ámbito de Galicia, el director del trabajo destacó que los indicadores señalan en 2014 una mejora que se podría constatar el próximo año. A este respecto explicó que por tercer año consecutivo la tasa de variación del PIB ha sido negativa, en torno al 1%, con lo que se frustró la expectativa de que 2013 fuese el año en el que se lograse el esperado giro a tasas positivas, hecho que se confía en lograr este año.
Meixide indicó que la demanda interna sigue siendo, al igual que en el conjunto del Estado, el principal elemento que explica la desaceleración del PIB gallego. Frente a ello, explicó que fue la demanda externa la que dinamizó la economía en Galicia, cuyo espectacular incremento (11,4%) logró contrarrestar el resultado del resto de variables.
Pese a que en la demanda externa sobresalen las ventas de vehículos y prendas de vestir, el patrón exportador gallego continúa diversificándose, ya que se observa cómo empresas gallegas están accediendo a nuevos nichos de mercado en países de rápido crecimiento.