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jueves | 25 abril | 2024
La prima de riesgo española, por debajo de los 500 puntos básicos desde el pasado jueves, cayó durante la sesión de ayer hasta los 477 puntos básicos, aunque el descenso pudo haber sido mayor si el Bundesbank (banco central alemán) no hubiera criticado ayer la posible compra de bonos por parte del Banco Central Europeo (BCE).
Desde primera hora, el sobrecoste que exigen los inversores para adquirir deuda española a diez años frente a la alemana, considerada la más solvente de Europa, se alejaba cada vez más de los 500 puntos.
El Bundesbank se muestra contrario a que el BCE compre deuda de los países con problemas
De hecho, la prima de riesgo llegaba a caer al filo de las 11.30 horas hasta los 458 puntos básicos, sin embargo, para los expertos, todo cambió tras conocerse las reticencias del Bundesbank a que el BCE intervenga en el mercado de deuda por los riesgos para la estabilidad financiera de la región.
Esto, unido a la incertidumbre sobre las citas claves para el futuro del euro de esta semana fueron el detonante para que la rentabilidad del bono español subiera y con ello la prima de riesgo del país.
Al final de la sesión, la deuda a diez años ofrecía una rentabilidad del 6,28% en el mercado secundario, frente al 1,51% de Alemania.
El Bundesbank mantiene su posición de que “en especial las compras de títulos soberanos del eurosistema deben ser vistas de forma crítica y conllevan considerables riesgos para la política de estabilidad”.
La institución que dirige Mario Draghi se muestra favorable a esta línea estratégica siempre y cuando lo soliciten expresamente los Estados afectados, lo que implícitamente conlleva a nuevas exigencias económicas. La postura del Gobierno de Mariano Rajoy es no pedir ayuda hasta que se conozcan las condiciones a las mismas.
Ante la presión europea, Rajoy podría tener que renunciar a uno de los pocos compromisos electorales que ha cumplido a rajatabla: mantener la revalorización de las pensiones. Según el diario “El País”, el presupuesto destinado a este fin, “lo único considerado intocable hasta ahora, ya no lo es”.
Mientras, la Bolsa española descendió ayer un 1,21 por ciento condicionada por el retroceso de los grandes valores y la recogida de beneficios después de tres semanas consecutivas de ganancias.
El Ibex 35 cayó 91,40 puntos, el 1,21 por ciento, hasta 7.469,60 unidades. Las pérdidas anuales aumentan hasta el 12,80 por ciento.
En Europa, con el euro en 1,234 dólares, Milán bajó el 1,01 por ciento; Londres, el 0,48 por ciento; París, el 0,22 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,21 por ciento, y Frankfurt, el 0,1 por ciento.
Todos los grandes valores bajaron: Repsol el 4,39 por ciento, la segunda mayor caída del Ibex; el BBVA, el 2,15 por ciento; el Banco Santander, el 1,38 por ciento; Inditex, el 0,98 por ciento; Telefónica, el 0,61 por ciento, e Iberdrola, el 0,18 por ciento. n
