La cifra de empresas gallegas exportadoras hasta noviembre de 2015 supera las de todo 2014

El número de empresas gallegas que realizan exportaciones con regularidad, aquellas que lo han hecho durante los últimos cuatro años consecutivos, superó el nivel de 2014, el mayor registrado hasta entonces, en los primeros once meses de 2015.
El conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, presentó estos resultados ayer en el Foro de Internacionalización da Economía Galega, en Santiago.
En ese contexto, explicó que hasta noviembre de 2015 se sumaron 2.214 exportadoras regulares, lo que supone “un 1,65 por ciento más” que el año 2014.
Por otra parte, el número global de compañías exportadoras hasta noviembre de 2015 ascendió a 6.040, un ritmo de crecimiento que, según destacó el conselleiro, también superó al de 2014. Además, las exportaciones también crecieron los primeros once meses de 2015, un 5,4 por ciento respecto a 2014 y un 4,3 respecto a 2013 –el año récord hasta el momento–.
Respecto a estos datos, indicó que no muestran todo el alcance de la “revolución exportadora” en la que se encuentra inmersa Galicia, debido a que no contemplan los datos de todo el año. De este modo, un mes antes de la finalización de 2015 las empresas gallegas ya habían superado, respecto a 2014, en un 32% sus exportaciones a Polonia, en un 17 por ciento las realizadas al Reino Unido, en un 11 a Alemania y en un 14,6 las hechas a China.
En este sentido, Conde destacó que estas cifras han puesto de manifiesto que la Estratexia de Internacionalización da Empresa Galega 2020, a la que se han destinado 50 millones de euros entre este año y el próximo, “funciona”. También recordó que en el marco de esta estrategia la Xunta ha invertido 10 millones en ayudas. Incidió en la importancia de “optimizar las oportunidades para las pymes” en este ámbito, que se enfrentan a inconvenientes como unos costes fijos elevados, el capital necesario para financiar las importaciones o las habilidades y formación necesarias para identificar oportunidades de negocio.
Paralelamente, también resaltó la “necesidad” de consolidar un ecosistema “propicio a exportar”, pero también de recibir una inversión marcada por unos “recursos humanos muy cualificados”, un clima de negocios “excelente” y con una “fuerte estabilidad política”, “buenas infraestructuras” y un “ecosistema innovador”.