Xesús Ferreiro por fin se hizo con la victoria

A la tercera ha ido la vencida. Tras dos participaciones con escasa fortuna, Xesús Ferreiro se ha quitado la espina y ha conseguido hacerse con la victoria en el Rally Rías Altas. Y lo ha hecho dominando la prueba de principio a fin, obteniendo la práctica totalidad de los scratchs que estaban en liza y sin dejar margen para la sorpresa. Un rally en definitiva perfecto. En el podio de la general, Ferreiro estuvo acompañado por Francisco López mientras que el tercer escalón lo acabará ocupando Cele Foncueva, que con una carrera muy conservadora ha sabido sacar partido de los abandonos de sus rivales.
En Pre 90, Juan Carlos Fernández estuvo dominando la práctica totalidad de la carrera, pero una avería mecánica los dejaría fuera a falta de dos tramos y esto lo aprovecharía Cele Foncueva para hacerse con la victoria final.
En la Pre 81 no hubo tanta historia, y Ferreiro desde el primer al último tramo la dominó, consiguiendo todos los scratchs de la categoría. Lo acompañaron finalmente en el podio Francisco López y Pablo Rey.
Luis Penido por su parte conseguía la victoria entre los Youngtimers. Pero esta categoría de vehículos, a pesar de contar con una clasificación en el Campeonato de España, no puntúa para la general.
Lo mismo que sucede con la categoría 5, la que sin duda ha deparado más emoción de toda la carrera. Javier López e Ignacio Silva mantuvieron un interesante mano a mano toda la jornada, con diferencias mínimas entre los dos pilotos. Silva buscaría apurar sus opciones en los dos últimos tramos, pero el esfuerzo final no sería suficiente para acabar superando a López. Junto a ellos en el podio estuvo Alexa Jardón.
En regularidad, en la categoría Sport, Rubén Fernández con su Citroën Visa GTI estuvo liderando casi todo el rallye, pero con pocas diferencias con sus perseguidores. Al final, José Ramón Campos, con un Porsche Carrera RS 3.0 conseguía la victoria que le servía también para hacerse con el Campeonato de España.
Por lo que se refiere a la categoría de 60 Km/h, tras un mano a mano entre Antonio Gutiérrez y Francisco Martínez, la moneda acabo cayendo del lado del segundo.