“Todo el mundo habla de que he regresado, pero nunca me fui”

Ryan Babel no puede ocultar la sonrisa. Es un jugador feliz y no esconde que vivió una gran noche en Riazor gracias al gol que logró en el descuento y que le dio los tres puntos al Deportivo ante el Sporting. Además de su buen criterio con el esférico, su tanto incendió las redes sociales y acaparó los titulares hablando del retorno de un jugador ‘top’, una visión que él matiza.
“Es una perspectiva diferente para mí. Todo el mundo dice que es la vuelta de Babel, pero yo nunca me fui”, subraya el futbolista, que recuerda que no estuvo retirado hasta ahora. “Jugué en otros equipos a los que se les prestaba menos atención (Kasımpaşa turco o el Al-Ain F.C. de los Emiratos Árabes), pero en estos clubes también di el cien por cien, y sentía que lograba cosas con ellos”, indicó.
Es consciente de que posiblemente muchos le perdieron la pista y no lo siguieron “en los últimos años”, y asevera que es “agradable sorprender a la gente haciendo que vean que todavía puedo jugar”.
Garitano ya había reconocido en la previa que Babel podía dar cosas al Deportivo y que por eso éste estaba disfrutando de minutos, pese a que aún no estaba en su pico de forma física. El jugador de Ámsterdam, a pesar de las buenas perspectivas con respecto a su rendimiento, cree que hay que ser prudente y no forzar la máquina. “Esas cosas (la puesta a punto) van más rápido, pero tenemos que tener cuidado para no ir muy rápido y que yo me lesione”, advierte.
Afirma que en los “últimos dos partidos” dio “un paso adelante” y su “meta personal” es seguir mejorando y aprovecharse de ese buen momento que está viviendo a nivel personal y de sensaciones en el campo.
Su diana, cuando ya Riazor se lamentaba de un nuevo empate, es algo que sigue recordando con una sonrisa no solo por cómo la ejecutó, sino también por lo que supuso para el Depor. “Es el momento con el que todo jugador sueña. La noche pasada (por el sábado) fue mi noche”, declara el atacante,que no se olvida de que la meta eran sobre todo “los tres puntos”. Una explosión de felicidad, un momento que fue “maravilloso” para el futbolista holandés.
Babel considera que el equipo merecía llevarse el triunfo, y asegura que el plantel sintió “alivio” por lograr la victoria. “Estuvimos presionando hasta final del partido”, apunta sobre el duelo el atacante tulipán.
La celebración de todos los jugadores, incluida la de el mismo, vino motivada porque finalmente la escuadra “recibió el premio”. “Quería celebrarlo con todo el equipo y por eso fui corriendo hacia el banquillo”, rememora el futbolista, que se fundió en una piña gigante junto al resto del plantel, una de las imágenes del encuentro, y que da idea de la buena sintonía que existe en el vestuario.
Un festejo en el contexto de una “semana difícil” para el Deportivo, que tenía una “gran necesidad” de volver a sumar de tres, tras hacerlo la última vez en la primera jornada. Con respecto al rendimiento del equipo, cree que todos estuvieron “concentrados” y que se sintieron “muy cómodos” durante la contienda. “Al final merecíamos el 1-0”, considera el atacante, que subraya que “fue una desilusión cuando el Sporting empató”. Una circunstancia que, por fortuna, no hizo que el equipo se arrugase. “Se vieron las ganas que teníamos de remontar porque presionamos, no bajamos la cabeza y buscamos el segundo gol”, resumió. Una diana, la suya, que cree que fue algo “muy bueno para la confianza del equipo”.
Un disparo potente con el que batió a Cuéllar tras dos avisos previos. “Tuve dos tiros anteriores que fueron bloqueados y me enfadé un poco (risas), porque en ese momento pensaba que no tendría más oportunidades (de marcar”, declara.
Un disparo lejano que recalca que es ‘marca de la casa’. “Por mi estilo de juego me gusta chutar desde lejos y lo haré más veces”, promete el futbolista. Babel tiene contrato con el Depor hasta el 31 de diciembre. Llegó para suplir la lesión de Joselu, que a su vez llegaba para hacer olvidar a Lucas Pérez, pero con su gol al Sporting ya se ha ganado a la afición coruñesa.
Se muestra prudente con respecto a su porvenir, aunque espera conseguir cosas importantes en el Depor. “Nunca puedes predecir el futuro. Mi sueño fue siempre jugar en España y ahora espero alcanzar grandes logros aquí”, desea Babel. El corazón de la grada ya lo ha conquistado.